¡Anótelo!.. Se centra atención nacional en la elección en el Estado de México… La histórica elección más difícil para el priismo mexiquense… Por fin una mujer gobernará la entidad más poblada del país… Ana Lilia Herrera y exgobernadores, elementales en el triunfo… Exista o no acuerdo, es un hecho que Del Mazo y Andrés Manuel “no se tocan”
Prácticamente estamos en el cierre de las campañas políticas de las candidatas a la gubernatura, Alejandra Del Moral, de “Va por el Estado de México”, y Delfina Gómez, de “Juntos hacemos historia en el Estado de México”. El domingo 4 de junio los ciudadanos mexiquenses, con credencial de elector, saldremos a votar por quien consideremos que es la mejor opción.
Si bien en Coahuila también hay sucesión gubernamental, la atención nacional se ha centrado especialmente en la entidad mexiquense. Si el PRI gana, llegaría al récord de un partido gobernando más de 100 años una entidad, pero si pierde, prácticamente sería la desaparición del priismo nacional.
Dos mujeres, en un hecho inédito, encabezan alianzas partidistas: Del Moral “Va por el Estado de México” (PRI, PAN, PRD y Nueva Alianza) y la candidatura común de Delfina de “Juntos hacemos historia en el Estado de México” (Morena, PT y Verde Ecologista). Es decir, luego de que Movimiento Ciudadano con Juan Zepeda, excandidato a gobernador por el PRD en 2017, ahora como dirigente estatal de MC, decide no participar, se genera un tema de polarización política.
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Alejandra se enfrenta a la elección más competida en la historia del priismo. Si bien en 2018 Alfredo Del Mazo sufrió para ganar, pues fueron los votos de sus aliados los que dieron el triunfo, entonces el PVEM (que ahora va con Morena), Nueva Alianza y Encuentro Social, las encuestas siempre fueron parejas, algunas arriba, otras abajo. Alejandra llegó con muchos puntos abajo, dicen haber alcanzado, pero sin duda la moneda está en el aire.
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En tres años -de 2015 a 2018-, por supuesto se dio “el efecto López Obrador”, los votos de Morena pasaron de poco más de medio millón a más de 3 millones. En elecciones municipales, Morena pasó a gobernar 27 municipios, de los más grandes. El PRI, de 84 que gobernaba en 2015 pasó a 21. El efecto López Obrador pegó sólo al PRI, que perdió 63 municipios, porque el PAN perdió dos (de 18 pasó a 16) y el PRD se quedó con los mismos 16 que ya tenía. Para 2021, el PRI, con Alejandra del Moral como dirigente, “se recuperó” considerablemente al ganar en 48 municipios. El PAN subió a 19 municipios y Morena, de 27 perdió solo uno. Los municipios que el PRI recuperó fueron del aliado de Morena, el PT, PRD y Nueva Alianza, se quedó gobernando 26.
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Son varios los personajes que serán clave para evitar la debacle del PRI: Ana Lilia Herrera Anzaldo, cedió a una reconciliación. Es la segunda diputada federal más votada del país y ha ganado todas sus elecciones de mayoría. Sin duda gran operadora política. Los exgobernadores priistas. Sobre todo Emilio Chuayffet, quien es representado por el coordinador de campaña, Alejandro Ozuna Rivero. César Camacho Quiroz, Arturo Montiel, Eruviel Ávila y el propio Enrique Peña, que está sin estar, pero que toma las decisiones más importantes.
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Se habla de un gran acuerdo entre el gobernador Alfredo Del Mazo y el presidente Andrés Manuel López Obrador para que no metan las manos en este proceso electoral. Cierto o no, es evidente que las candidatas no han tocado ni al gobierno federal ni al estatal, por supuesto, como podrían hacerlo. Porque es claro que el Estado de México tiene muchos puntos en contra, lo mismo que el país con muchos temas del mandatario nacional que molestan mucho a la población.
El PAN, el PRD y Nueva Alianza saben que el triunfo representa un oasis en el desierto para toda la oposición del país. Es por ello que se ve un trabajo intenso de sus seguidores, de su clase política y de su estructura. Y Aunque nada está fácil ni para un lado ni para el otro, lo que sí, es que los ciudadanos tendrán el domingo 4 de junio la última palabra.
