Valle de México
La Unión Industrial del Estado de México (UNIDEM) reconoce que el salario mínimo actual no alcanza para satisfacer las necesidades, pero considera que el aumento de esta percepción no puede ser mucho mayor a lo autorizado por la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami).
La Comisión anunció que a partir del 1 de diciembre el salario mínimo general aumenta ocho pesos con lo que quedará en 88.36 pesos diarios.
Para Francisco Cuevas Dobarganes, dirigente de la UNIDEM, el aumento salarial no podía ser mucho mayor al autorizado por la Conasami porque ocasionaría problemas en diversos segmentos de la economía y tendría efectos inflacionarios.
“Actualmente la inflación, según el Banco de México, ronda el 7 por ciento y tampoco es momento de incrementar el salario indiscriminadamente ya que finalmente tiene efectos inflacionarios”, dijo.
Agregó que “pensamos que la forma como se está manejando los incrementos es adecuado, ya que habla de una parte que tiene que ver con la inflación de los últimos 12 meses y otra con la recuperación del poder adquisitivo que perdió en las últimas décadas”.
El líder empresarial comentó que un aumento mucho mayor al autorizado impactaría considerablemente las finanzas del sector privado, pues en muchos contratos colectivos de trabajo las prestaciones se fijan en función de ese monto.
Recordó que los márgenes de utilidad son sensiblemente menores a los de hace 25 años, que fue cuando empezó el proceso de globalización, pues ahora las empresas del ramo industrial tienen márgenes de utilidad que van del 10 al 30 por ciento y si de la noche a la mañana suben muchas de las prestaciones, habría algunas ramas empresariales que quedarían en condiciones muy desventajosas con respecto a otros países, lo que ocasionaría cierres y pérdida de empleos.
“Las ramas que tienen mayores niveles de afectación son las de muebles, metalmecánica y confección, en donde la mano de obra, puede ser hasta más del 50 por ciento del costo”, expuso.
Destacó que para el caso del ramo de la hospitalidad ,que está compuesto por restaurantes, bares, hoteles y salones de banquetes, la mayoría de los trabajadores tiene sueldos mínimos ya que su principal percepción son las propinas.
Para la UNIDEM la distinción entre la inflación y el poder adquisitivo para determinar el incremento salarial, permite a los sindicatos y empresas, tener una base de negociación más acorde con la realidad.
Y considera que los grupos empresariales y sociales que proponen aumentos mucho mayores o mucho menores, solo tienen una visión parcial de los efectos en la economía de fijar un incremento irracional. El Salario Mínimo debe tener un nivel que permita satisfacer las necesidades básicas, pero este desajuste debe ser compensado en al menos cuatro años.