Toluca
La fiesta del natalicio del Niño Jesús, es una forma de expresar el surgimiento de una nueva etapa, en la que dios brinda la oportunidad de ser felices.
Eso es lo que opinan los feligreses católicos que acudieron a la Catedral de Toluca para bendecir a sus figuras de niño dios, todos vestidos con ropón en tonalidades blancas, marfil o beige.
Cientos de personas acuden con fe a ésta ceremonia que durante la homilía escuchan una invitación a retomar una vida llena de luz, abandonar sentimientos de tristeza o depresión, pues “llegó el redentor que nos sacará del dominio de la esclavitud”.
Mujeres y hombres, llegan en familia a las escalinatas de la Catedral ubicada en el centro del municipio, en donde al pie del atrio es posible observar a las vendedoras de velas, atados de romero, flores y costales de semillas que pretenden servir para mejorar la suerte y armonizar el ambiente de los hogares.
En su mayoría, personas mayores que llegan con tres o cuatro, hasta siete imágenes, todas de tamaños distintos; algunos portan las que pertenecen a sus hermanos o hijos, otros más traen a sus “bebés” cargando como si tubiersn vida.
Así se vive la fiesta de la Candelaria, el natalicio del niño Jesús, tradiciones que no deben ser relegadas, coinciden las mujeres y que traen consigo el amor, la esperanza y la fe de que habrá mejoras en el entorno, también en sus vidas.