Alrededor de 300 personas se dirigieron al edificio donde se encuentran los policías militares, luego de que arribaron a Igualada, España, donde de manera pacífica manifestaron su rechazo a la actuación que tuvo la guardia nacional durante la jornada electoral del referéndum del pasado domingo.
Aunque no se ha confirmado por la policía, es posible que un contingente de ellos haya desalojado algunos hoteles ubicados en Calella y Barcelona; el alcalde Marc Castells desmintió esta posibilidad en su cuenta de Twitter.
Un grupo de habitantes se manifestaron frente al cuartel de la Guardia Civil, a donde se trasladaron siete vehículos y una camioneta de Mossos; y un automóvil de la policía local que resguardan las calles cercanas al cuartel.
Cartells mencionó en un twit que “es un error hacer ninguna manifestación al cuartel de la Guardia Civil ni hoy, ni ningún día”.
La republicana Alba Vergés, se trasladó al lugar y afirmó que la gente se encuentra muy molesta y pidió a los manifestantes mantener la calma.
Pasando la media noche también llegó al cuartel Cartells quien le pidió a los manifestantes que no se concentraran frente al cuartel.