Toluca/Estado de México
La cuesta de enero de este año será más profunda para los mexicanos, pues aunado a la inflación, la pandemia por Covid-19 encareció la producción de insumos incrementando aún más sus precios, indicó Miguel Ángel Díaz Carreño, profesor e investigador de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx).
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En entrevista con DigitalMex, recordó que el año pasado se tuvo una inflación del 7.4% de acuerdo con el Inegi, el doble de lo que normalmente se registraba en años anteriores y, aunque esta situación se presenta a nivel global, en nuestro país desde hace más de 20 años no se registraba una inflación como esta.
Indicó que la situación conlleva problemas para la población mexicana que registra ingresos reducidos, pues aunque actualmente el salario mínimo se ubica alrededor de 172.9 pesos, el 25 por ciento de la plantilla laboral del país, es decir, la cuarta parte de las personas trabajadoras, reciben esta remuneración y, aunque en esta administración el salario mínimo se duplicó, sigue siendo bajo.
"Cuando entró el actual gobierno, el salario mínimo era de 88.4 pesos y aunque se duplicó a 172.9 pesos sigue siendo muy bajo, sigue siendo insuficiente, se encuentra por debajo de la línea de pobreza extrema, por eso el Coneval calcula que cerca del 9 por ciento de la población se encuentra en esta situación de pobreza extrema".
Además, señaló que dicha inflación mantendrá una fluctuación importante en el precio de ciertos insumos indispensables en la canasta básica como la tortilla y algunos cereales:
"Aunado a la pandemia, los procesos de producción de algunos insumos avanzan a ritmos muy diferentes en los países, eso ha generado una limitante en la oferta de ciertos artículos e incluso hemos visto la caída en la disponibilidad de muchos de ellos, lo que ha impactado en sus precios, lo que afecta más a las familias de escasos recursos debido a que son las que destinan la mayor parte de sus ingresos a la alimentación, productos que están incrementando más su precio en comparación de artículos en general".
Finalmente, para no sufrir esta cuesta de dinero, recomendó evitar los gastos no esenciales, también conocidos como gastos hormiga, pues se tratan de compras innecesarias normalmente a bajo costo, por ejemplo, cuando se compra un café o golosinas, son baratas, pero diario es un gasto que impacta en nuestras finanzas.
Además, recomendó hacer un comparativo de precios debido a que muchas veces el precio del mismo producto varía entre 50 y 100 por ciento en los establecimientos, sobre todo los precios de algunos medicamentos.
"Es importante que antes de tomar la decisión de gastar en algún artículo lo consultemos en al menos cuatro establecimientos para tener la comparativa del precio y optar por el que nos convenga".