Uno de los galardones de mayor arraigo dentro de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, La Catrina, fue otorgado al dibujante mexicano Antonio Helguera. En el homenaje participaron Raúl Padilla López, presidente de la FIL; Ernesto Flores Gallo, rector del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño de la UdeG, y el monero Patricio Ortiz, quienes acusaron a Helguera de ser un artista al que no le importa causar polémica con sus cartones y poner el dedo en la llaga, como todos los de su especie.
Durante el homenaje se proyectó un video de semblanza dedicado a Helguera, donde se resaltó la madurez de su trabajo y el humor crítico que funciona como una crónica de los problemas de México. Antonio actualmente publica en el periódico La Jornada y la revista Proceso. Ha sido coeditor de las revistas de El Chahuistle y El Chamuco, y también ha sido reconocido dos veces con el Premio Nacional de Periodismo en 1996 y 2002.
El ahora “catrín”, tras pararse en el estrado, agradeció de forma especial al recién fallecido Eduardo del Río Rius y a Rafael Barajas El Fisgón, ganadores anteriores de La Catrina, a los cuales calificó como una mala influencia: “Cada cartón político que se publica hoy en día es, independientemente de que el autor lo sepa o no, lo reconozca o no, es en sí mismo un homenaje a Rius. Sin él ese cartón no hubiera existido y ni se hubiera publicado”.
De igual forma aprovechó para honrar la memoria de todos los reporteros y fotoperiodistas asesinados durante el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, en especial a Miroslava Breach Velducea, Regina Martínez y Javier Valdez Cárdenas, para quienes pidió paz y justicia. “Este sexenio ha sido especialmente severo y hostil; duro con los medios de comunicación, principalmente con medios impresos y especialmente con medios críticos”.
Helguera declaró que el abandono hacia los medios recae en la seducción de la mala información que otorgan la Internet y las redes sociales, por lo que invitó a los jóvenes a la buena lectura y a buscar el periodismo realizado por profesionales, ya que, puntualizó, es muy fácil manipular a una sociedad ignorante.