Tenancingo
En San Martín Coapaxtongo, en el municipio de Tenancingo los damnificados por el sismo de 7.1 grados Richter del martes 19 de septiembre no reciben ayuda oficial, por parte de las autoridades, pero no responsabilizan únicamente a loa secretarios estatales o al gobernador Alfredo del Mazo, sino a los delegados y Copacis que apoyan únicamente a sus afiliados o amigos.
Uno de los 70 vecinos de esta comunidad, quien se quedó con una casa derruida y no más que la desesperanza de no tener ni que ponerse, dice que la sociedad civil ha llegado, entregan agua, alimento preparado, pero solo pasan por una calle principal o se quedan en la cabecera del municipio, el conflicto es que los vecinos afectados que se ubican entre las comunidades más alejadas no pueden alejarse de sus viviendas.
“No es flojera, es que estamos trabajando. Estamos tratando de sacar el escombro, de palear la tierra. Muchos han venido, ya han realizado hasta cinco o siete censos distintos, unos del municipio, otros del gobierno estatal, unos más de organizaciones civiles pero nadie se queda. Van y vienen, toman fotos, nos piden datos y desde el martes no vuelven”.
Alegan que el presidente municipal, Roberto Sánchez Pompa ya notó qué hay rapiña; sin embargo, no ha hecho nada para detener la concentración de víveres y acopio que llega, y distribuirla entre los más perjudicados por el fenómeno natural que abatió a cientos de personas en esta localidad.
“Entendemos que el municipio es grande, qué hay muchos daños y todos queremos ayuda, que estamos desesperados. Pero no es solo eso lo que nos hace quejarnos, estamos muy conscientes de que necesitamos trabajar y ponerle empeño para salir adelante, pero solos no podemos porque o nos roban o nos dejan abandonados a la suerte”.
Los afectados piden camiones para sacar escombros, llevar material que hace falta pero alimento ya no es necesario, sino maquinaria, vehículos que les permita transportar lo que quedó en el piso.
Alegan que la ayuda se ha desbordado, pero únicamente en llevar alimento; sin embargo, no es lo que requieren sino material para terminar de derrumbar construcciones a medias, esas que se quedaron en pie por una barda pero que son inútiles o inhabitables.