Toluca
El director del Centro de Integración Juvenil (CIJ), Juan Carlos Cruz Miguel, reconoció que algunas drogas como las metanfetaminas o los psicotrópicos se han extendido en su consumo, especialmente entre la población rural y de los 17 a los 21 años, lo que provoca la necesidad de delinquir para adquirirlos; inicialmente son prácticas ilícitas que comienzan en el hogar.
Explicó que en Toluca cuentan con un estudio epidemiológico de las zonas consideradas como conflictivas, compatible con el tipo de población que reciben para tratamiento, por ejemplo El Seminario, Zopilocalco, La Unión, Santa Bárbara, El Cóporo, regiones que son consideradas por la administración local y las áreas encargadas de la seguridad como de atención “de manera emergente y se trata de barrios tradicionales.
Precisó que el rango de edad de consumo es de 17 y 18 años, la mayoría son hombres; en el caso de la mariguana el rango es de tres hombres por una mujer, reflejando un incremento de 2010 a la fecha pues antes eran 10 por una, “de seguir así se va a equiparar”.
“Con la metanfetamina los adictos se vuelven violentos, el aumento en su consumo deriva de que hay sustancias más caras y aunque son completamente químicas, de fácil preparación y acceso, son más adictivas y también costosas, por lo que el chico debe ver la forma de conseguirlas; muchas veces incitando al robo que inicia en casa y luego se extiende a otros sitios con la finalidad de comprarlas”.
Curiosamente disminuyó el consumo de cocaína; en 2005 más de la mitad de los pacientes atendidos dijo haberla inhalado alguna vez, pero los últimos datos revelaron que menos de 30 por ciento de ellos lo hicieron; en contraste, los últimos reportes refleja que 20 por ciento de los atendidos usó la metanfetamina; es decir de entre 600 pacientes, al menos 40 o 60 y “de seguir la demanda no será por mariguana, alcohol o tabaco, que brindemos ayuda sino por los daños irreversibles que pueden generar en el cerebro dichas sustancias, porque sólo algunas -las menos- dan la facultad de que al limitar el consumo haya rehabilitación física y sicológica”.
No es frecuente que quien la usa lo haga bajo un engaño o la hayan depositado de forma velada en alimentos o bebidas; hay algunas que se esconden en el olor o sabor de la comida o de los refrescos. Pero en este caso, los jóvenes las usan en cuestiones recreativas, porque proporciona un estado de vigilia más prolongado de hasta tres o cuatro horas, la cocaína brinda esa sensación sólo por 40 minutos.
Aunque hay algunas sustancias que sí pueden ser depositadas de forma intencionada en la bebida o el alimento, como las depresoras o medicamentos que provocan estado de somnolencia y que facilitan el abuso, asalto o ataque sexual.
El alza entre los psicotrópicos deriva -según la opinión del especialista- en que no requieren sembrarse, entonces el combate no es al cultivo como ocurre con otras drogas, sino su preparación depende de procesos químicos que son más fáciles de hacer en laboratorios clandestinos. Por ejemplo, para la cocina se necesitan sustancias controladas y quienes elaboran ropa, necesitan permisos para importarla; por el contrario, para la metanfetamina no, salvo la pseudoefedrina que venía en los antigripales.
Dijo que actualmente atienden a 222 nuevos casos de personas con adicciones al alcohol, la mariguana o el tabaco que se suman a los 150 que no han egresado, quienes quizá ya redujeron el consumo pero no lo han cancelado por completo.
Además, durante el el periodo vacacional reduce la cantidad de personas atendidas puesto que muchos de los jóvenes son identificados en los centros educativos o instituciones. “Es muy importante señalar que si no fuera por los docentes sería imposible detectar muchos casos, ellos son captados en la escuela, los docentes son quienes los canalizan para recibir tratamiento”.
En la capital mexiquense fueron identificados como las principales drogas empleadas por jóvenes el alcohol, la mariguana y sustancias químicas de bajo costo; por ejemplo, la estopa con tiner por lo que el Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic), junto con el ayuntamiento de Toluca buscan a 40 ciudadanos interesados en ser capacitados para identificar y canalizar a personas con dicha problemática.
En la colonia El Seminario, es superior el índice de personas que consideran a la población foránea como responsables de la propagación de esta conducta, sobre todo porque es una zona en donde prevalece la presencia de ciudadanos oaxaqueños, guerrerenses y de Michoacán; sin embargo, es necesario corregir la visión, toda vez que “identificamos en los Barrios Tradicionales más uso de solventes que en esta delegación”, indicó Regina Soledad Cruz Vega, secretaria técnica del Consejo Municipal de Seguridad del ayuntamiento de Toluca.
“Hay un uso exagerado de drogas sintéticas entre los jóvenes, se ha hecho popular una serie de opciones para prepararlas y consumirlas; entonces, es necesario identificar la problemática de cada zona. Pero sigue siendo el alcohol, el principal consumo, así como los solventes y la mariguana por el precio bajo, a diferencia de otras drogas con costos elevados”.