Zona sur/Estado de México
Desde esta madrugada, los municipios de Tlatlaya y Amatepec, cerraron la movilidad de tránsito y personas con el propósito de tratar de contener la ola de contagios de COVID-19 que está afectando a esta región sureña del Edomex.
A 173 kilómetros y a 3 horas y media de la capital del Estado de México se encuentra el municipio de Tlatlaya, el más alejado de los municipios sureños, el cual, al igual que Amatepec, blindó sus fronteras desde la madrugada de este martes 22 de diciembre, por el regreso a semáforo rojo que significa alto riesgo de contagio por la pandemia de SARS-COV 2.
Hasta el momento el cierre de carreteras se mantiene en la entrada y salida de ambos municipios del lado de Tejupilco. Así mismo por el municipio de Arcelia, que es el acceso al Estado de Guerrero.
Desde la madrugada de este martes, los habitantes y autoridades de Amatepec y Tlatlaya colocaron filtros para evitar el ingreso de personas ajenas a dichas demarcaciones, que pudieran presentar síntomas de COVID-19, argumentando que, ante la falta de atención del gobierno estatal, ellos mismos tomaron las medidas de prevención que consideraran pertinentes.
Sin embargo, habitantes de la zona han manifestado su desconcierto ante el blindaje, e incluso han señalado molestia ante esta medida, misma que solo permite el acceso a los camiones que lleven alimentos o mercancía a las tiendas locales.
Las autoridades no han especificado por cuanto tiempo será este aislamiento, pero advirtieron que nadie puede entrar ni salir de ambas jurisdicciones municipales.
También se establece que solo las personas que están enfermas podrán salir del municipio acompañadas de un familiar para su atención médica.
