Toluca
Marcelino Pascual Narváez, representante de los comuneros de San Jerónimo Acazulco, pidió la intervención de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y organizaciones internacionales ambientalistas en defensa de los pueblos indígenas, en el foro que desarrollarán el lunes 29 de enero en la zona de Ocoyoacac para planear la defensa de su territorio.
Explicó que tras ganar el amparo para suspender la construcción del Tren Interurbano México - Toluca, emitido el 19 de enero por el Juez Primero de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales en el Estado de México, requieren diseñar una estrategia de defensa puesto que “sabemos que quieren sacarnos de nuestros campamentos establecidos junto a las instalaciones del Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ), en el kilómetro 34 de la carretera México-Toluca”.
Lo anterior, pues el director general de Transporte Ferroviario y Multimodal, Guillermo Nevares Elizondo, se reunirá con autoridades del gobierno federal para determinar el ingreso de la fuerza pública y con ello continuar con la construcción del tren.
Recordó que en el paraje conocido como el Pantano, los trabajos afectaron uno de los mantos freáticos con lo que se surten más de 5 mil habitantes de la zona, además de haber afectaciones graves a una de las pistas de motos y otros establecimientos comerciales de La Marquesa.
“Están destruyendo la fauna, la flora, los acuíferos y además nos perjudican en la actividad turística que llevamos a cabo y de la que vivimos varias familias”.
Reveló que la tarde del jueves, en las cabañas de venta de comida, el arquitecto encargado del tramo de la obra indicó que “van a tratar de tronar tanto a nuestro representante legal, Santiago Pérez Alvarado, como al presidente del comisariado”.
Por lo anterior, responsabilizaron a las autoridades de la Dirección General de Transporte Ferroviario de lo que les ocurra tras el enfrentamiento que pretenden iniciar el fin de semana con fuerza pública que ya resguarda la zona.
“Estamos dispuestos a defender nuestra región, la tierra que nos pertenece, porque esta región fue afectada por los pilotes establecidos a un kilómetro de la carretera La Marquesa - Chalma”.