Con fecha del 22 de mayo, la Presidencia de la República recibió mi propuesta de cuatro cuartillas en la que propongo al presidente Andrés Manuel López Obrador incluir en libros de texto, a través de una iniciativa elaborada por él y entregada al Congreso de la Unión la guía naturista de por qué y cómo comer las frutas y verduras de forma científica, equilibrada y compatible químicamente en beneficio de la salud de los habitantes de México, principalmente los niños y personas vulnerables, ante las contingencias ambientales. Del mismo se entregó copia a la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo. El texto, que no debe esperar protocolos para beneficio de los habitantes de México, principalmente de las ciudades contaminadas, lo hago público mediante mi columna semanal:
Lic. Andrés Manuel López Obrador
Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos
Palacio Nacional
Presente
Ante los altos índices de contaminación que registra la zona metropolitana del Valle de México y la falta de profundidad y definición que tiene la recomendación a la población referente a consumir frutas y verduras para mitigar los efectos negativos de los elementos contaminantes me permito proponer a usted la siguiente guía básica naturista sobre cómo comer las frutas y verduras a fin de que la misma sea enviada por usted como iniciativa de ley al Congreso de la Unión y se introduzca en los libros de texto y las guía de la alimentación de las distintas instancias de salud del gobierno federal en beneficio de las futuras generaciones.
Guía básica:
1.- Es importante promover un cambio radical de hábitos en la población mediante el consumo de productos naturales del campo. Esta cotidianidad permitirá no sólo mejorar la salud de las personas sino fortalecer la actividad del campo y, por ende, la economía del campesino.
2.- Como base para ese cambio de hábitos se requiere promover el consumo de frutas y verduras y no de alimentos chatarra, empacados sin calidad.
3.- Se privilegiará el consumo de frutas de la temporada de forma equilibrada bajo la guía de la combinación científica de las mismas a fin de que su habitual consumo ayude a la población a prevenir males resultantes de las condiciones negativas de un medio ambiente contaminado.
Para una buena salud se debe partir del principio básico de la naturaleza de:
¿Por qué y cómo comer las frutas?
a).- El cerebro depende de su principal combustible para funcionar: la glucosa, que se encuentra principalmente en las frutas. El hombre por naturaleza es frugívoro. Recolector-cazador y no cazador-recolector, razón de más para privilegiar el consumo de frutas.
b).- Las frutas de la temporada, principalmente las cítricas, deben comerse en ayunas, después de haberse hidratado la persona con un vaso de agua.
c).- Las frutas tienen tres categorías, las cuales deben de conocerse a fondo para poder hacer un consumo equilibrado y bien combinado de las mismas.
Ácidas: Naranja, toronja, mandarina, limón, piña, frambuesa, fresa, kiwi, guayaba, etc.
Neutras: Manzana, pera, aguacate, papaya.
Dulces: Plátano, mango, mamey, durazno, zapote, higo, melón, pérsimo, tomate, uva madura, tuna, etc. (Estas, en todas sus variedades).
Las combinaciones:
1.- Se pueden combinar ácidas con neutras o dulces con neutras pero nunca ácidas con dulces. La neutra más común es la manzana. Esta es una regla de la trofología o de la química de la naturaleza. Nunca deben combinarse frutas con verduras porque químicamente sus combinaciones son incompatibles en virtud de que las frutas contienen la energía del sol y las verduras la energía de la tierra. Esto es, de acuerdo a la teoría del electromagnetismo del profesor Nicolás Capo, uno de los más destacados naturópatas a nivel mundial, las primeras son magnéticas y las segundas eléctricas.
Nota: Una regla de la naturaleza y de la sabiduría ancestral es no comer sandía con melón al mismo tiempo pues aunque ambas son dulces son incompatibles químicamente. Además recordar la vieja máxima: “te vas con melón o con sandía”. Nunca consumir un coctel con todas las frutas.
2.- Se recomienda durante la temporada de invierno o en situaciones de contingencia como las que se registran en las grandes urbes como la Ciudad de México consumir de preferencia frutas ácidas en ayunas, después de haber tomado agua.
La razón: las frutas ácidas limpian y fortalecen el sistema inmunológico en mayor medida que las frutas neutras y dulces, aunque las tres categorías son de igual importancia. La razón es que toda fruta ácida está siempre acompañada de bioflavonoides. Estos son elementos químicos de la naturaleza que nos van a proteger contra los accidentes cardiovasculares ya que limpian, fortalecen y desintoxican arterías y vasos capilares, y mitigan los efectos de los elementos nocivos del medio ambiente y los radicales libres, además de que ayudan a prevenir paros respiratorios, embolias, aneurismas, derrames, entre otros males. 1*
3.- Las frutas deben consumirse siempre con el estómago vacío o en ayunas y no comerse como postre o después de alimentos proteínicos o a base de harinas ya que crean problemas digestivos. Los problemas digestivos se ocasionan después de comer frutas sobre proteínas o harinas porque los azúcares que debieran ser absorbidos primeramente se quedan en segundo plano en la digestión y provocan gastritis, entre otros problemas. Los azucares naturales de las frutas en ayunas se consumen directa y fácilmente entran al torrente sanguíneo. La fruta es alimento y no un postre como en ocasiones se acostumbra. 2*
4.- Las frutas, por el hecho de estar formadas por más de 75 u 80 por ciento de agua son limpiadoras, y constituyen una especie de suero natural (con sus sales minerales originales) ingerido a través del sistema digestivo que limpian mientras se mantienen en el cuerpo únicamente como alimento. Mientras más horas pase un organismo con frutas durante toda la mañana mayor será la limpieza y desintoxicación de éste. Por ejemplo, la toronja contiene alfahidroxiácidos (AHA), conocidos como ácidos frutales, molécula sencilla, que le permite trabajar de manera eficiente para llevar agua y minerales a la célula y mantenerla joven y resistente contra factores externos. Si quiere combatir arrugas y ahorrarse el carísimo botox y bloqueadores solares y mantener una apariencia juvenil en rostro, cuello, manos y piel hay que consumir todas las mañanas toronja.
El tomate, que también es fruta, es ante todo una medicina natural y al igual que la toronja, preventiva de muchos males. Jordi Sintes Pros, cita en su libro Virtudes curativas del tomate y otras hortalizas, que maduro es, como pocos alimentos vegetales, rico en vitaminas del complejo, A, B, C y E, lo que lo convierte en un excelente alimento para mantener la salud y prevenir muchos males como cáncer, vista y, cardiovasculares. Las culturas prehispánicas ya conocían sus virtudes para estimular la fertilidad y combatir la impotencia sexual, como las del aguacate, pero fueron los franceses quienes lo bautizaron como pomme d´amour o manzana del amor. Por ser bajo en calorías y azúcares, al igual que la papaya, favorece a las personas obesas y diabéticas.
Pero el dato más interesante es el que dio a conocer la Universidad de Finlandia Oriental, de que es rico en Licopeno, potente antioxidante, diez veces más que la vitamina E, lo que previene de manera efectiva contra infartos cerebrales ¡Y EL CANCER!, sobre todo el de próstata y piel.
5.- Ahora bien, el consumo de verduras en relación con las frutas debe tener un lapso de diferencia de al menos seis a ocho horas, o menos, para ser ingeridas dependiendo de la actividad física de cada persona. Lo ideal es desayunar frutas y ya muy tarde ingerir verduras. Estas últimas, de preferencia al vapor o en caldo pero no demasiado hervido para que no pierdan sus propiedades nutritivas.
Recordemos que el más famoso de los desayunos, que se volvió una norma internacional, por haber sido asumido por muchos países fue el ientaculum romano. El mismo estaba basado en frutas de la temporada, mermeladas naturales, queso fresco, ajo y pan integral a base de trigo. Se popularizó tanto que a nivel mundial todo excursionista, alpinista, caminante o atleta no iniciaba su justa deportiva si antes de salir de casa no había consumido pan integral untado con mermelada natural casera.
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Los médicos rusos de la década de 1950 Vladimir Zelenin y Alexander Miásnikov, éste último Premio Internacional Estetoscopio de Oro, publicaron su magistral obra Guía del Corazón y las Arterias, libro en el que concluyen que el ser humano tiene la capacidad de vivir hasta 150 años en óptimas condiciones.
“Sin embargo, la mayoría de las personas envejecen en forma prematura. Son muy pocas las que llegan al límite natural (fisiológico) de su vida, las que logran evitar las enfermedades y, en primer lugar, las del corazón y los vasos, frecuentes y crueles compañeras de la vejez.
Citan que Mahmud Eivasov, de origen azerbaijano, llegó a la edad de152 años, por lo que los sabios en la materia aseguran que la duración de la vida no debería ser inferior a 100 años, o inclusive 150 como concluyó en sus investigaciones Alexander Bogomólets.
El científico y experto en el tema Leonard Mervyn, autor del libro Vitamina C, enemiga del catarro común coincide con los médicos rusos en que la clave para una salud permanente y una larga vida está en el cuidado de los vasos del organismo humano. Refiere que las vitaminas son esenciales para esa condición, pero el último autor pone énfasis en las frutas cítricas como la base.
Concluyen que la condición de nuestros vasos, arterias y corazón, además de un sistema digestivo limpio, sano y bien nutrido son esenciales para una vejez sana y larga. La especialista y autora del libro Salud intestinal, la clave para estar en forma, Varda Fiszbein, recomienda la limpieza de los intestinos como regla básica de la salud. Recuerda que dicha práctica de higiene corporal ha sido llevada a cabo desde tiempos remotos por las más diversas culturas hasta que, por diversos motivos, cayó en desuso.
Las frutas cítricas, para todos los autores que conocen del tema a fondo y se especializan en la rama de las arterias, corazón y vasos, constituyen la base para una prolongada salud.
Por ejemplo, el libro Cítricos Frutas deliciosas que protegen tu organismo, cita: “Una toronja al día nos hace bien a todos”. Mejora las funciones del organismo. Evita el envejecimiento prematuro, el cáncer y enfermedades de las vías respiratorias, así como del aparato circulatorio, entre muchas otras cualidades. (Ahhh, y limpia los pulmones y arterias a los fumadores). Es empleada para fabricar colágeno y fortalecer el sistema inmunológico. Actúa como antioxidante, elimina los radicales libres. Contribuye a la salud de la piel que se expone por tiempo prolongado al sol. Protege del cáncer de esófago, estómago, páncreas, útero, recto y mama. Reduce los problemas cardiovasculares. Impide que el colesterol malo se deposite en las paredes de los vasos sanguíneos.
Rica en minerales: calcio, fósforo, magnesio y potasio. Tiene propiedades diuréticas. Combate el estreñimiento. Contiene alfahidroxiácidos (AHA). Estos combaten arrugas y mantienen la apariencia juvenil en rostro, cuello, manos y piel. En su libro Jugo Terapia, Bernard Jansen cita el caso de una persona que vivió 159 años.
Conclusión
La fruta no es un postre. Es un alimento, el que acompañó a la humanidad en sus orígenes. El hombre, cuando apareció en la tierra tuvo como primera herramienta sus manos. Antes de que aprendiera a usar un pedazo de piedra o sílex, con sus manos asió el primer alimento que fue un fruto que le proveyó de los azúcares para que su cerebro funcionaria. La fruta, al igual que las verduras son la base de la cadena alimenticia para mantener una salud óptima como lo indica la Pirámide de la Salud de la Organización Mundial de la Salud.
Fraternalmente
Víctor Manuel Zendejas Orozco, Presidente de Fraternidad Naturista Ecologista de la Sierra de Guadalupe Mahatma Gandhi A.C. (Franature). Escritor y autor del libro El Ayuno que Sana Rejuvenece y Libera, con la técnica de Mahatma Gandhi (ISBN 978-607-96858-3-6).