La barranca del Ehécatl que no es parte del parque estatal Sierra de Guadalupe pero sí un pulmón ecológico vital ante el agresivo y desplanificado crecimiento urbano, producto de décadas de corrupción, fue declarado por el gobierno de Ecatepec área natural protegida.
Una medida impensable si gobernaran los corruptos del prianistas, administraciones en las que se dio una desmedida especulación de la tierra, invasiones y urbanización sin planificación, cuyas consecuencias vive en su contra la población de la gran conurbación de la zona metropolitana del Valle de México.
La barranca del Ehécatl, que sufría un gran abandono que casi la convirtió en basurero o zona árida, desde hace algunas décadas, ha sido convertida en un microclima por la agrupación ambientalista Guardianes del Ehécatl y Sierra de Guadalupe. Esta asociación civil ha llevado a cabo una gran reforestación de la misma y en la actualidad cuenta con mariposa monarca y un proyecto de jardín polinizador, que recientemente fue premiado y reconocido por la secretaría de Medio Ambiente estatal.´
Después, hace pocos años, se sumó a dicho rescate la agrupación Cuatro Rumbos para Ti, que dirige la ambientalista y abogada Ivonne Herrera, quien llevó a cabo, a nombre de las dos representaciones, las gestiones ante el gobierno morenista de Fernando Vilchis para que dicha área natural fuera declarada protegida en el nivel municipal.
Con esta medida la administración de MORENA suma una palomita histórica en una medida sin precedentes que beneficia no sólo a la Sierra de Guadalupe al ampliar la interconexión de hábitats naturales desde la parte urbana, sino que significa un granito de vida natural contra el cambio climático que ningún gobierno local del neoliberalismo hasta la fecha había aportado.
Se trata, según datos oficiales de 7.4 hectáreas en que el cabildo decidió aceptar la propuesta del alcalde Fernando Vilchis Contreras, para proteger la barranca y evitar su invasión, argumentó el director de Medio Ambiente y Ecología municipal, Acoyani Baroco Bonilla.
Alrededor del parque estatal Sierra de Guadalupe hay varias barrancas similares en las que no debe haber cambio de uso de suelo y ser declaradas de manera similar, si hablamos de que Coacalco, Tultitlán y Tlalnepantla serán gobernados con una nueva e innovadora visión donde se tome en cuenta la problemática ambiental mundial.
La barranca de Los Acuales, en Coacalco, es un pulmón verde con vegetación endémica y nativa que deberá ser protegida también pues es la más importante en Coacalco y la segunda en importancia del Valle de México después del Ehécatl.
¡Extra! ¡Extra!
¡Felicidades a Guardianes del Ehécatl, a cuatro rumbos y a gobierno de Ecatapec de Fernando Vichis. ¡Sí! Esa medida de proteger un pulmón ecológico es histórica.