Toluca/Estado de México
Los diputados del PRD pidieron que se dé trámite a la propuesta de Ley de Reproducción Asistida que considera 85 artículos.
A decir de la diputada Araceli Casasola Salazar, después de que se apruebe las dependencias tendrán la obligación de regular aspectos como las técnicas de Reproducción Asistida, Gestación por sustitución, Inseminación artificial, Fecundación In Vitro, Clínicas y Centros de Reproducción asistida y Crear la Comisión de Reproducción Asistida del Estado de México.
La legisladora señaló que el artículo 4, párrafo segundo de la Constitución establece:
“Toda persona tiene derecho a decidir de manera libre, responsable e informada, sobre el número y el esparcimiento de sus hijos”.
Esto, afirmó, es un derecho de las y los ciudadanos mexiquenses que se traduce en la responsabilidad del gobierno de proveer los mecanismos jurídicos necesarios para tal efecto.
Es por ello que indicó que los avances registrados en las últimas dos décadas en la entidad, obligan a seguir una ruta que atienda la demanda colectiva y creciente de regular nuevas opciones para dar cumplimiento al libre desarrollo de la familia.
“Hoy en día, el concepto de familia no se limita a individuos unidos por filiación sanguínea o adopción, prueba de ello es la concepción que ha brindado la Suprema Corte de Justicia en su tesis aislada denominada: Derecho a la Reproducción Asistida, en la cual, hace referencia al concepto de familia cuya protección ordena la Constitución, por lo que la tutela se extiende a todas sus formas”.
Sostuvo que la iniciativa de ley será una herramienta eficiente para el desarrollo y beneficio de una vida plena para las y los ciudadanos.
Indicó que la decisión de las personas que deciden ser padre o madre, en el sentido genético o biológico, corresponde al ámbito del derecho a la vida privada y a la familia.
“No debe haber injerencias arbitrarias por parte del Estado, es decir la autonomía reproductiva y el goce de los beneficios del progreso científico y tecnológico, que implica el derecho a estar informados, a tener libre elección y acceso a métodos para regular la fecundidad, que sean seguros, eficaces y aceptables.
Aseguró que de no registrarse dichos principios básicos, se concluye que al limitar la reproducción asistida se está violentando la identidad personal y la autonomía para decidir sobre la planificación familiar.
