Toluca/Estado de México
Con el objetivo de abordar los casos de personas desaparecidas, así como los de feminicidios y violaciones, la diputada del partido Morena, Yesica Rojas Hernández, ha anunciado que presentará una iniciativa durante el tercer año de ejercicio constitucional de la Legislatura. Esta propuesta busca la creación del Banco de ADN de uso forense en el Estado de México.
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En la actualidad, el Estado de México cuenta con una cifra alarmante de 11 mil personas desaparecidas, situándose en el tercer lugar de esta crisis de violencia e inseguridad que aqueja al país. Solo Jalisco y Tamaulipas superan la problemática en este sentido, según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas o No Localizadas.
Hasta julio de este año, se han registrado 2 mil 900 denuncias por delitos de género, colocando al estado en una posición preocupante en términos de violencia. Yesica Rojas Hernández, en su rol como miembro de la Comisión Legislativa de Declaratorias de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres por Feminicidio y Desaparición, ha indicado que durante el próximo periodo de sesiones en el Congreso Local, propondrá la emisión de una ley que establezca la creación del Banco de ADN para uso forense en el Estado de México. Esta propuesta también incluirá modificaciones a diversas disposiciones de la Ley de Seguridad.
El propósito fundamental del Banco de ADN será funcionar como un laboratorio de investigación forense que albergará los perfiles genéticos de las víctimas y los indicios relacionados con diversos delitos. Además, se pretende identificar a los posibles responsables, así como recopilar información acerca de servidores públicos involucrados en estos casos.
La diputada mencionó el ejemplo del Banco de ADN de la Ciudad de México, donde en casos de delitos como homicidios, lesiones, privación de la libertad, agresiones sexuales, incesto, secuestro, violación, estupro y trata de personas, se realiza una toma de muestra genética no invasiva a los posibles responsables mediante saliva. Estas muestras son enviadas al laboratorio para su cotejo en un plazo menor a 24 horas. Esto permite determinar si una persona fue víctima de un individuo en particular o si el presunto responsable de un delito está vinculado con otros casos.
Uno de los logros destacables del Banco de ADN de la Ciudad de México es el caso de Daniel "N", conocido como el violador serial de Oceanía. Este individuo estuvo involucrado en varias agresiones sexuales contra mujeres, y gracias a las pruebas obtenidas a través del banco, el Ministerio Público pudo recopilar datos suficientes para que un juez lo condenara a más de 150 años de prisión.
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