El papel que desempeñen, determinante para sus partidos… El PAN da la muestra de buenos gobiernos municipales con siete reelectos; el PRI, con tres… El PRD, con Neza, su bastión partidista
En las dirigencias de los partidos políticos PAN, PRI y PRD hay preocupación, pues saben que con las prerrogativas poco podrán hacer para rearmar sus estructuras. Deben ser muy ingeniosos para allegarse de recursos y fortalecerse para las elecciones intermedias de ayuntamientos y diputados locales. Es el objetivo antes de pensar en la de gobernador. De los resultados de éstas, se tomarán decisiones sobre posibles alianzas para enfrentar a Morena.
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Pero los presidentes municipales jugarán un papel determinante. De su buen desempeño dependerá la recuperación de la confianza ciudadana. El PAN demostró que un efecto “Peña” o “AMLO” nada pudo hacer cuando hubo buenos resultados. Siete de ocho alcaldes fueron reelectos en los municipios que gobierna. Enrique Vargas del Villar, el ejemplo más sobresaliente: su triunfo fue contundente en Huixquilucan. Leticia Zepeda en Chapa de Mota y Miriam Escalona en Melchor Ocampo. Soyaniquilpan, Temascalapa, Huehuetoca e Ixtapan del Oro, los otros cuatro.
En el PRI, son cuatro los alcaldes que, realmente, cargarán con esa responsabilidad: de Valle de Bravo, Mauricio Osorio, de Villa Victoria, Mario Santana, y de San Mateo Atenco, César Serrano (reelectos), y de Lerma, Jaime Cervantes Sánchez. Ixtapaluca y Chimalhuacán, “propiedad” de Antorcha Campesina, no se pueden contar porque son de contentillo. Por supuesto, el resto es importante, pero estos son los más visibles.
Para el PRD, su bastión es Nezahualcóyotl, pero si las diferencias internas no se resuelven, podrían dar al traste con lo poco que les queda. Juan Hugo de la Rosa lleva una loza en la espalda. Veremos de qué son capaces, pues Morena tratará de regresar por todo.
