La crítica ha alabado las actuaciones carismáticas y química entre Bogart y Bergma, así como la profundidad de las caracterizaciones, la intensidad de la dirección, el ingenio del guion y el impacto emocional de la obra en su conjunto.
El 26 de noviembre de 1942, en el Teatro Hollywood de Nueva York, mientras el mundo se encontraba inmerso en la Segunda Guerra Mundial, se proyectó por primera vez “Casablanca”, una de las películas más aclamadas de la historia.
Pese a que el estreno oficial estaba previsto para la primavera siguiente, se eligió esta fecha aprovechando que apenas unos días antes se había producido el desembarco de los aliados en el norte de África, situación que debilitaría en gran medida el régimen colaboracionista de Vichy, representado en la película por el capitán Louis Renault (Claude Reins).
Casablanca es una historia de amor en medio de la guerra, sustentada en las magníficas interpretaciones de dos de los más grandes actores que ha dado el cine americano, Humphrey Bogart e Ingrid Bergman.
Dirigida por Michael Curtiz, Casablanca narra un drama romántico en la ciudad marroquí de Casablanca bajo el control del gobierno de Vichy.
La trama se centra en el conflicto de Rick Blaine (Bogart) entre el amor y la virtud.
Rick pertenece a la resistencia contra los nazis; estando en París conoce a Ilsa Lund ( Bergman) de quien se enamora perdidamente. Ilsa espera en vano encontrar a su marido desaparecido -Victor Laszlo (Paul Henreid)- que es, a su vez, el líder de esa lucha contra la Alemania de Hitler.
La historia se desarrolla en Casablanca, paso obligado de los miembros de la resistencia que buscan un visado para continuar su lucha desde fuera de Francia.
Ganadora de varios premios Óscar, incluyendo el de mejor película en 1943, Casablanca se ha convertido en una de las películas más importantes de la historia del cine, llegando a ocupar el tercer lugar en la lista de las 100 películas que todo el mundo debería ver, según el American Film Institute (AFI), superada únicamente por “Ciudadano Kane” y “El Padrino”.
En 1989, Casablanca fue seleccionada por el National Film Registry para ser preservada en la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos, por ser considerada «cultural, histórica o estéticamente significativa».