Música libre en un espectáculo vivo y lleno de sorpresas, es lo que el ensamble francés Surnatural Orchestra promete dar al público mexicano en el que será su primer concierto en el país.
Hace 16 años en París, un grupo de amigos comenzaron a reunirse para realizar por diversión jam sessions con la variedad musical que converge en la “ciudad luz”, desde klezmer hasta balcánica. Poco a poco, se convirtieron en una agrupación con sonidos e instrumentos de una Big Band Jazz, pero con la movilidad y teatralidad de una banda callejera.
“Una particularidad de la orquesta es que no tenemos un director o jefe, funcionamos como un colectivo donde todas las decisiones se toman de manera democrática, consensual”, explicó en rueda de prensa Clea Torales, flautista de Surnatural Orchestra, ensamble que forma parte de la oferta artística de Francia, país invitado de honor en el 45 Festival Internacional Cervantino.
Esta colectividad decidieron llevarla y hacerla obvia en sus espectáculos en vivo y para ello adoptaron desde sus inicios una técnica llamada soundpainting, creada por el compositor estadounidense Walter Thompson, que se define como un lenguaje a señas para la improvisación.
Así, con puños cerrados, manos arriba o el movimiento de derecha a izquierda de sus brazos, cada miembro de Surnatural es capaz de reorganizar el acomodo escénico de la orquesta o redirigir el rumbo del concierto, alterando con sus gestos las texturas, matices, alturas, acordes, y hasta el tipo de interpretación.
“En cualquier momento una persona, o varias, se pueden poner al frente de la orquesta y pueden cambiar completamente el camino de una composición o, por ejemplo, empezar desde el silencio y con esos signos crear en el momento algo nuevo, algo completamente improvisado”, agregó desde Francia, el trompetista Izidor Leitinger.
Esta novedosa forma de crear puentes sonoros entre piezas, o bien, crear composiciones exclusivas para los asistentes a cada concierto requiere de un alto nivel de concentración de los músicos, que busca distanciarse de las normas marcadas por la música académica.
“Nos gusta tomar riesgos, tener libertad; por ejemplo, no tenemos orden para las piezas de música, nada más decidimos la primera obra y luego, según lo que pase en el concierto, el ambiente y el público, decidimos tocar otra pieza, pero durante el concierto”, detalló François Roche-Suárez, trombonista de la agrupación.
Esta flexibilidad ayuda a demostrar la versatilidad y gran talento de los 18 músicos que integran el ensamble, porque de interpretar una composición aprendida de memoria que suena a jazz parisino pueden transformar su sonido hasta llegar a crear en vivo una canción de rock y terminar con una improvisación influenciada por ritmos africanos o una tarantela italiana.
La libertad creativa, melódica y hasta poética de Surnatural Orchestra se presentará por primera vez en México, como parte de los espectáculos del FIC 45. “Nos alegra mucho la invitación de la embajada francesa en México, y también tocar en este festival tan maravilloso y famoso que es el Cervantino en Guanajuato. Es gran honor para nosotros ir a México”, dijo Roche-Suárez, descendiente de familia oaxaqueña.
Para el concierto que ofrecerán en la Explanada de la Alhóndiga de Granaditas, el 28 de octubre a las 20:00 horas, los músicos franceses tendrán como base un repertorio de estreno, pero prometen que tanto su presentación en Guanajuato, como las otras cuatro que darán en México (Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y Puebla), serán únicas.
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