Cuando el Covid-19 paralizó las actividades deportivas en todo el mundo, Dafne Navarro, se encontraba a una competencia de conseguir su boleto olímpico a Tokio 2020.
La inesperada pandemia mundial frenó de tajo los objetivos de la gimnasta de trampolín quien, con el pasar de los días, aprendió a ver el lado bueno de dicha contingencia.
“La semana pasada sería mi último clasificatorio a Juegos Olímpicos, en una Copa del Mundo de Italia y se pospuso. Todos nos sentimos decepcionados, pero al menos tendremos un año más para prepararnos mejor”, reflexionó la deportista.
Aunque la celebración por la plaza olímpica tendrá que esperar, la seleccionada se encuentra optimista.
“Ya estoy muy cerca de la cuota y por eso no me desespero, lo que debo hacer ahora es aprovechar el tiempo extra para buscar, inclusive, una medalla en Tokio”.
Aunque no cuenta con un trampolín en casa, la medallista mundial hace lo posible por mantenerse en forma y aprovechar el tiempo.
“He tratado de adaptarme, a veces hago dos o tres sesiones al día sin acrobacias, también tengo pláticas con mi psicólogo y veo videos”, explicó Dafne, número 13 del ranking mundial.
En Tokio participarán 16 gimnastas de trampolín, de las cuales, seis de ellas tienen su lugar asegurado y el resto clasificará de acuerdo al ranking.
“Estoy a una competencia de lograr un boleto olímpico, espero que mi participación sea muy buena en Italia y pueda cumplir con mis metas”.
Dafne podría convertirse en la primera mexicana que le consiga plaza a México en gimnasia de trampolín, desde que la disciplina ingresó al programa olímpico en Sidney 2000.
