Toluca/Estado de México
La mexiquense y ex medallista olímpica de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, la ciclista Belem Guerrero Méndez, se ha convertido en la entrenadora de las ciclistas de medio fondo a petición de la Federación Mexicana de Ciclismo.
Belem asegura estar muy contenta, "es un gran reto el trabajar en especial en este momento con la corredora del equipo Astana, Yareli Salazar Vázquez quien está calificada a Tokio 2020, tenemos solo un año para afinar detalles que la lleven a lograr un gran resultado", así lo indicó la nueva entrenadora vía telefónica.
La ganadora del Premio Nacional del Deporte en 2001 y con gran experiencia en rutas como la del Giro de Italia, carreras en Canadá, en Estados Unidos y el resto de América. Ella contará con el apoyo del metodólogo Fausto Albizúa Fernández quien formó parte del grupo multidisciplinario del fallecido entrenador Óscar Echevarría, quien estuvo con Belem en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Belem desea que se incorporen más pedalistas a este trabajo, sabe que hay ciclistas con calidad, incluso confianza que se le "enchina la piel" al recordar que la jovencita Yareli Acevedo del equipo PatoBike BMC, tiene medalla del Mundial juvenil, justo en la Prueba por Puntos.
En relación a la prueba del Ómnium en la que competirá Yareli Salazar, Guerrero Méndez comentó "Es una prueba muy compleja que reúne velocidad y resistencia, además debe haber una buena estrategia de recuperación para que pueda lucir su habilidad y agilidad, ella es demasiado buena y quiero ayudarle en todo lo que pueda".
La medallista olímpica desea que se incorporen más pedalistas a este trabajo, sabe que hay varias con calidad, incluso confianza que se le "enchina la piel" al recordad que la jovencita Yareli Acevedo del equipo PatoBike BMC, tiene medalla del Mundial juvenil, justo en la Prueba por Puntos.
Finalmente, dijo que su objetivo es ser una motivadora para que las ciclistas con las que trabaje tengan un excelente resultado en sus competencias internacionales y para ella significa; "una grata emoción y una responsabilidad volver a portar los colores nacionales", concluyó.