Estado de México
El 80% de los habitantes del Estado de México no cuenta con ningún tipo de seguro, una cifra que refleja la ausencia de una cultura preventiva en la entidad, pero también de factores como la informalidad laboral, los bajos ingresos y la falta de educación financiera, indicó el Consejo Asegurador Mexicano (CONAMEX).
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Maribel Pérez, presidenta del capítulo estatal de CONAMEX, afirmó que los seguros son herramientas fundamentales para mitigar el impacto económico de incidentes personales o patrimoniales, aunque su penetración sigue siendo baja.
“El principal beneficio de un seguro es la tranquilidad. En caso de fallecimiento, accidente o enfermedad, no tendrás que preocuparte por dinero. Podrás decidir en qué hospital atenderte”, explicó.
Principales retos y recomendaciones
De acuerdo con la representante del ramo, la educación financiera desempeña un papel crucial para que más personas vean en los seguros una inversión y no un gasto, por lo que recomendó empezar con productos básicos como un plan personal de retiro y un seguro de automóvil.
Sin embargo, destacó que la cobertura debe ser personalizada, ya que factores como el estilo de vida y los hábitos de salud pueden influir en los costos y beneficios.
“Existen seguros diseñados para diferentes necesidades. No es lo mismo un seguro para un trabajador independiente que para alguien con un empleo formal. Por ello, es vital evaluar opciones adaptadas a cada situación”, agregó.
Panorama nacional y estatal
A nivel nacional, el seguro de automóvil es el más contratado, incluso por encima de los seguros de gastos médicos y de vida, no obstante, solo uno de cada 10 vehículos cuenta con esta protección.
En el caso del Estado de México, el panorama es similar, agravado por una alta tasa de informalidad laboral, que limita el acceso a prestaciones como seguros médicos o de vida.
El Consejo Asegurador Mexicano subrayó que los costos asociados a incidentes, como accidentes vehiculares o enfermedades graves, pueden superar con creces el costo anual de un seguro, por lo que se plantea como indispensable reforzar campañas de educación financiera para sensibilizar a la población sobre los riesgos de no contar con cobertura.
“Es necesario que veamos el aseguramiento como una inversión que brinda estabilidad económica y protege nuestro patrimonio y a nuestras familias. Solo así podremos enfrentar mejor los imprevistos que inevitablemente llegan”, concluyó.
