Habitantes de los municipios de Lerma y Toluca coincidieron en que, desde noviembre del año pasado a la fecha, se duplicó la presencia de perros callejeros que agreden a los transeúntes cuando portan bolsas con alimento y que además deambulan enfermos por las inmediaciones de escuelas, hospitales y que muchas veces forman grupos de hasta 12 integrantes.
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En el caso de Lerma, el señor Sánchez Amaya opinó que es urgente un refugio porque algunos agreden a las personas al salir de la carnicería, pollería u otros negocios de comida, sin embargo, admitió que desconoce qué autoridad municipal se hace cargo del problema.
Mientras que la señora Gloria Campuzano, afirmó que la presencia de los canes se ha convertido en un riesgo para la comunidad, toda vez que contaminan con sus heces, pero también al agruparse son peligrosos.
“Los perros son para cuidar las casas, ellos no tienen la culpa de estar abandonados, nosotros no hacemos nada por ellos, además hay quienes los alimentan en las calles y eso los lleva a permanecer en estas condiciones, pero es peligroso”, dijo.
Algunos entrevistados dijeron que hay un grave problema porque los dueños no son responsables, hay quienes los mantienen en la calle todo el tiempo, pero cuando el Centro de Control Animal se los quiere llevar, reclaman porque son sus mascotas.
Rosa Felipe, en la zona norte de Toluca, afirmó que incluso hay quienes tienen negocio de crianza de animales, o de cruza para la venta de los cachorros, pero no se hacen responsables de ellos dentro de los domicilios, sino los dejan sueltos, en la calle, los alimentan en predios baldíos.
“Hasta les ponen su cama para que puedan dormir sin frío, pero no los vigilan y se vuelven agresivos, atacan a las personas en bicicleta o en motocicleta, a quienes van corriendo con alguna bolsa de alimento", comentó.
Sin embargo, la mayoría de los entrevistados coincidieron en que desde hace más de tres meses no responde la autoridad responsable de atender la proliferación de animales en la calle. Por ejemplo, la señora María de la Luz, habitante de San Pablo Autopan, dijo que a su hija la mordió un perro cuando caminaban cerca de la iglesia de la delegación, la llevó al Centro de Salud y pese a que hubo reportes al número del Centro de Control en Toluca, no hubo presencia de la autoridad para llevarse a los canes.
Hasta 2021 la población de perros en la capital mexiquense ascendía a 250 mil perros callejeros con una mayor densidad en la zona norte del municipio, según datos del Centro de Control y Bienestar Animal (CCyBA), informó el ayuntamiento.
Anualmente este centro recibía 200 llamadas de auxilio por ataques de perros en situación de calle, por lo tanto, como medida de contención, el 70% de las esterilizaciones que llevaban a cabo se realizaron en el norte, por ser la zona con mayor incidencia de ataques.
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