Toluca
En el Estado de México, como en el resto del país, el cáncer más frecuente en los niños de 5 a 14 años es la leucemia y desafortunadamente la mayoría de los casos llegan con un estado avanzado, de hasta el 60 y 80%, pues generalmente el diagnóstico no llega a tiempo, coincidieron Norma López Facundo, responsable de Oncopediatría en el Hospital Materno Infantil del ISSEMyM y Francisco Galindo Rocha director del Hospital Para el Niño de Toluca.
“Implica que el tratamiento es más agresivo, hay más complicaciones y más mortalidad. Por eso la importancia de llevar más información a los hospitales de segundo nivel, con los pediatras, de datos sobre las características más comunes de este padecimiento, a fin de que sea diagnosticado a tiempo”, insistió Galindo Rocha.
En el hospital Materno Infantil del ISSEMyM reciben un promedio de 25 a 30 casos nuevos al mes, quienes están sujetos al tratamiento por un lapso de tres años en promedio y actualmente entre 80 o 90 pacientes son atendidos semanalmente.
“La gran mayoría son diagnosticados en etapas muy avanzadas de la enfermedad, el 20% llegan de manera oportuna, en muchos casos tienen enfermedades muy agresivas y requieren un proceso muy largo e intenso de atención, con un nivel de sobrevida de 75%”, reveló López Facundo.
Dicha atención médica por fuera tendría un costo de 300 mil pesos o más, dependiendo de la gravedad de los casos, coincidieron los médicos y en el país hay un registro de nueve casos por cada 100 mil habitantes menores de 18 años.
En el Hospital Para el Niño del Instituto Materno Infantil del Estado de México, el 80% de los pacientes que atienden al año es por leucemia, con una promedio de sobrevida del 60%, siendo este el más difícil de los padecimientos no sólo por el costo que implica la atención médica, sino por el desgaste en las familias, pues por ejemplo en caso de que ambos padres sean trabajadores, uno deberá abandonar sus actividades para poder enfocarse a la vigilancia de 24 horas que requiere el paciente.
Además de las leucemias linfoblásticas agudas, siguen los linfomas, tumores del sistema nervioso central, además de los retinoblastomas en ojos y los del abdomen, como pueden ser el riñón o hígado.
Para las instituciones médicas el presupuesto para atender estas enfermedades crónico degenerativas es muy elevado, toda vez que cada paciente deberá recibir tratamiento por dos años; los primeros tres meses el paciente debe asistir al hospital hasta tres veces por semana y en el caso del IMIEM, ninguno es enviado al Oncológico del ISSEMyM, sólo al Hospital Infantil de México donde se tiene convenio para trasplantes de médula ósea.
Las características principales de esta enfermedad es la fiebre, cuando sin ninguna razón un niño presenta temperaturas elevadas por la tarde o noches sin mostrar cuadros de gripa o infecciones estomacales.
La aparición de moretones sin motivo, es decir, a pesar de que jueguen hay apariciones de hematomas en espalda, la columna o sitios donde no es frecuente que se peguen; la presencia de bolitas en el cuello o inflamación de los ganglios, palidez, desánimo, sangrados anormales o crecimiento del bazo, del hígado.
“El cuidado debe ser extremo con los niños, cualquier cosa que no les guste deben acudir con el pediatra y tratar de encontrar la causa sobre estos síntomas”, dijo el director del Hospital Para el Niño.
Sin embargo, al cáncer lo llaman el “gran imitador”, pues puede aparentar por los síntomas diversas enfermedades, desde cuadros que se asemejen a padecimientos más simples o casos de infección.