Toluca/Estado de México
El director del Organismo de Agua y Saneamiento de Toluca (AyST), José Maya Ambrosio, informó que derivado de que debieron destinar hasta 2 millones de pesos para la reposición de las tapas de las coladeras, no pudieron concluir 28 obras que servirían para evitar encharcamientos graves e inundaciones en igual número de sitios en la ciudad.
“El problema de robo de rejillas y tapas de coladeras es bastante fuerte, entonces nosotros debemos sustituirlas, lo que nos quita cantidad de material que podíamos aprovechar en otras obras”.
En lo que va de la presente administración tienen un registro de 60 rejillas robadas, pero es imposible dejar las coladeras o rejillas sin tapas, pues implican accidentes viales, incluso que pueden causar la muerte, de modo que el organismo busca sustituir el material con alguno menos atractivo o destinar recursos que impiden atender otros conflictos.
Normalmente los robos son en diversas calles y delegaciones, se trata de acero que tiene una gran demanda, pues la tonelada cuesta hasta 20 mil pesos, lo que las hace más atractivas para los rateros; sin embargo, las venden muy baratas.
“Muchas veces hemos comprado material reciclable que las hace igual de atractivas porque también son vendibles; el problema es que al quitarlas no sólo se llevan las rejillas sino también el marco, el cable, otros materiales, es una reparación integral más la mano de obra”.
Por estos robos hay tantas denuncias presentadas que únicamente llevan otra más ante las autoridades, para sólo incrementar los puntos donde registran el delito, pero no hay resultados, ningún detenido. Presumió que se debe a que “parece complejo investigar un sitio y otro”, pero al robo de rejillas se suma el de cable de cobre de bombeo que afecta a los vecinos porque los dejan sin servicio de agua potable y abarca hasta cuatro colonias, que cuesta entre 40 mil y 60 mil pesos por cada ocasión, pues va del poste hasta la bomba.
De las obras que tenían planeadas, por contar con 33 sitios de inundación en la ciudad, concluyeron cinco, quedarían 28 pendientes, lugares donde es grave el encharcamiento, porque son “lagunas” que se forman en el pavimento, en la calle y que son molestas, dañan la carpeta asfáltica y por eso vamos a buscar técnicas para conducir el líquido hacia la rejilla más cercana o colocar más rejillas.
En este año, está pendiente el de la calle Vicente Guerrero, cerca de Ciudad Universitaria, considerado dentro de los puntos más importantes de inundación o encharcamiento con las tormentas; concluyeron el de la López Mateos, en la colindancia con el municipio de Zinacantepec.
Actualmente trabajan en la delegación de Santa María de las Rosas, en donde construyen una captación pluvial, por ser un punto de inundación severo, por lo que generan drenes que desvíen el agua hacia Las Torres, a la par de una boca de tormenta en el camellón que debe autorizar la Junta Local de Caminos, por ser una vía estatal.
Para reducir las complicaciones, el organismo construyó tres campos de infiltración en el Barrio de Tlacopa, en la estación del Tren Interurbano México - Toluca y uno más en el Panteón Municipal, que sirve para reducir las inundaciones y captación de agua.