La capital francesa se ha visto en la necesidad de suspender nuevamente bares y cafés por no tener la capacidad para contener el aumento, en los casos por Covid-19.
A partir de este martes se activará la “Alerta Máxima” con una duración de 15 días; sin embargo, seguirán abiertos restaurantes, cines, teatros y museos. Bajo la consigna de un nuevo protocolo sanitario y con medidas restrictivas a largo plazo.
Esta medida se ha hecho debido a la inquietud de la autoridad para frenar los contagios en zonas locales, algunos departamentos como Marsella y Guadalupe suspendieron de manera parcial locales de comida y debidas.
Por eso la alcaldesa de la capital, Anne Hidalgo, se siente convencida de la suspensión parcial de los locales y demostró su total apoyo al representante del Gobierno (prefecto) Didier Lallement, señalando la postura que “estas medidas intentan poner freno a la epidemia que va demasiado rápido”.
Así quedaría el protocolo:
• Bares: cerrados.
• Cafés: cerrados
• Brasseries: Únicamente servicio de mediodía a la noche.
• Restaurantes tradicionales, gastronómicos, de comida rápida, temáticos o de hotel: abiertos.
Para el caso específico de los restaurantes las medidas que se van a implementar son: un metro de separación entre mesas, seis clientes por mesa (anteriormente se permitía hasta 10 personas), gel hidroalcohólico en cada mesa.
Y las medidas para las personas que desean consumir en estos lugares son: uso de mascarilla, y sobre todo, al momento de ingresar registrarse con nombre, dirección y teléfono. Esto con la finalidad de poder rastrear casos de contagios, medida que se implementó con éxito en Alemania e Italia.
Por otro lado, se prohíbe consumir de pie y los clientes tienen la obligación de pagar en la mesa. Pero en definitiva quedan suspendidas las ferias, salones profesionales, congresos, circos y espectáculos bajo carpas.
Según datos de la Agencia Regional de Sanidad (ARS) hay más de 250 casos por 100 mil habitantes, más de 100 entre los mayores de 65 años y la ocupación de la UCIS alcanza 35%. Por eso, se prevé tener un control sobre las visitas a las residencias de ancianos, solo se les permitirá el ingreso máximo a dos personas y con previa cita.
Por último, los dueños de bares están molestos con esta medida. Pero no hay compromiso de iniciar protestas (hasta ahora), ya que, el gobierno de Jean Castex ha buscado soluciones para no dañar la economía.