Se trata del científico ruso Alexander Sasha Kagansky de tan solo 45 años, quien se desempeñaba como biólogo celular y genetista; además, era encargado de numerosas investigaciones sobre cáncer y se encontraba trabajando en una posible vacuna para combatir el coronavirus SARC-coV-2.
El cuerpo sin vida de Kagansky fue encontrado desnudo y con heridas por arma blanca, frente a un edificio en la calle Zamshin de San Petersburgo, en Rusia; lugar donde perdiera la vida al caer del piso 14. El suceso cobro indignación en la sociedad rusa, el pasado domingo 20 de diciembre.
Las autoridades arrestaron al dueño del apartamento y abrieron una investigación por asesinato. Se trata de un excompañero, quién tras ser detenido fue interrogado en el transcurso de 48 horas, para posteriormente dejarlo en libertad a la espera de los resultados del polígrafo.
Aunque desde el comienzo las investigaciones preliminares no cuadraban con la versión del detenido. El presunto responsable afirmaba que el científico se había suicidado, sin embargo, en los estudios realizados al cuerpo sin vida se tenía rastros de heridas por arma blanca, abriendo la posibilidad de que Kagansky sufrió un ataque minuto antes de caer por la ventaja.
Trayectoria de Alexander Kagansky.
Los resultados de sus trabajos han logrado reconocimiento global. El científico es considerado como uno de los iniciadores de la epigenética sintética (nueva rama de la ciencia biomédica). Por otro lado, Kagansky contaba con un doctorado en Biología Molecular de los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos, después de pasar ahí cerca de tres años, obtuvo su nombramiento en 2004.
Actualmente fue nombrado director del Centro de Medicina Genómica y Regenerativa de la Universidad Federal del Lejano Oriente en Rusia, cuyo principal objetivo es la comprensión de la base molecular del destino celular en las células normales y las enfermedades; también en crear o descubrir numerosos fármacos, además de buscar soluciones para curar el cáncer y en la regeneración de tejidos.