No es venganza lo que la mayoría de mexicanos queremos; no es odio tampoco lo que deseamos acumular, lo que esperamos es que usted señor Presidente cumpla con lo que le mandata la Constitución y que, entre tantas responsabilidades, le obliga a castigar a quienes se beneficiaron de sus cargos para obtener recursos financieros públicos al margen de sus respectivas responsabilidades.
Fue electo de manera abrumadora precisamente porque los mexicanos ya no queríamos seguir siendo engañados, burlados, saqueados, asesinados, maltratados, olvidados por esa minoría a la que usted le dice rapaz, que acumuló además de fortuna, enojo y rechazo ciudadano.
Está muy bien que castigue a los que en lo sucesivo abusen del poder que les otorgue usted con sus cargos, pero no pueden ni deben quedar impunes quienes se despacharon con la cuchara grande para llevarse dineros del erario a sus cuentas personales.
Ya está librando una monstruosa batalla con los que hicieron del negocio del robo de combustibles forma de vida, de lo que según sus cifras obtenían más de 60 mil millones de pesos al año.
En esa ilícita pero lucrativa actividad, como todos sabemos, están involucrados funcionarios de los sexenios anteriores y trabajadores sindicalizados de Pemex de ayer y hoy, que como bien dijo, pretenden retarlo y jugar a las vencidas con su gobierno.
Así como finalmente privó la sensatez en usted para rectificar y que el mando de la Guardia Nacional sea un civil, así también debe reconsiderar su decisión de no castigar al expresidente Peña Nieto y a sus voraces ex colaboradores, que fueron cómplices del huachicol.
Si usted procede en consecuencia de sus valores, de su ética y moral pública, no podrá ser omiso ante tan brutal y descarado saqueo y robo a un bien estratégico de la Nación. Ya dijo que le colmaron el plato. Pues ejerza su autoridad y ordene se aplique sin distingos la ley.
Para paliar un poco la rabia e indignación que sentimos la mayoría de ciudadanos al conocer el tamaño del hurto, es urgente y necesario, que a todos aquellos que desde los altos mandos de Petróleos Mexicanos y del gobierno federal, en complicidad con trabajadores y bandas delincuenciales muy bien organizadas, se les castigue de manera ejemplar con todo el peso de la ley y la justicia.
Usted, presidente Andrés Manuel López Obrador, se atrevió como nadie a cambiar el rostro del gobierno; a darle dignidad y valor perdidos a eso de ser servidores públicos. Está pegando fuerte a una mafia nacida del poder, y eso debemos aplaudirlo y reconocerlo, por encima de los análisis y reflexiones que se hacen de que si debió o no tener otra estrategia para evitar el enojo ciudadano, ante la tremenda incomodidad y problemas que se han generado como consecuencia de su valiente decisión.
Sin duda su forma de representar a la Presidencia de la República es inaudita: no vivir en Los Pinos; no usar el avión presidencial y trasladarse por líneas comerciales; no resguardar su seguridad con los elementos del Estado Mayor Presidencial; ser jefe del Ejecutivo y vocero del gobierno federal a la vez; disminuir los salarios de él y de los altos mandos. Eso y más han hecho que su Cuarta Transformación tenga rostro y apellido.
Es obligación de todos respaldar al Presidente. Si se equivoca en su actuar podremos señalar los errores, pero aún es muy pronto para intentar descalificar a un hombre de carne y hueso que está demostrando que sí se puede cambiar el rumbo de México.
Apuntes finales...
Cuanta razón tenía la diputada federal Tatiana Clouthier, en el sentido de que la Guardia Nacional debía ser encabezada, como se planteó desde un principio, por un civil. Es mujer de congruencia y valor. Debe crecer su figura como una sólida aspirante al gobierno del estado de Nuevo León... Y hablando de sucesiones, si Alfonso Durazo Montaño, actual titular de Seguridad Pública, sigue dando bandazos, su siempre soñada aspiración a gobernar su natal Sonora se verá reducida a nada. La senadora Lilly Téllez y Ana Gabriela Guevara cruzan los dedos para que Durazo se desgaste más de la cuenta en esa muy difícil chamba que hoy encabeza, para convertirse en opción... El tema de la sucesión en el liderazgo del sindicato de Pemex se hace cada vez más que urgente, porque es secreto a voces que Carlos Romero Deschamps es pieza clave en eso del robo de combustibles. Entre muchos apuntados para desplazarlo, destaca el veracruzano José Rubén Rosaldo Cordero, para convertirse en el próximo Secretario General del STPRM. Hay un grupo de empresarios en materia petrolera que le dan su respaldo. El tema debe ser prioritario para el gobierno federal... Puebla se sigue complicando y las figuras y grupos que pelean por el control del nombramiento del gobernador interino, llevarán a la entidad a mayor polarización. En Morena sigue empujando un impresentable ex priista como opción para hacer a un lado a Miguel Barbosa. Alejandro Armenta se siente con respaldo suficiente para tumbar al ex candidato y cercano a López Obrador. Eso y lo que arrastra de desgaste el ex senador Barbosa, le pueden complicar el escenario. Del lado del PRI, quiérase o no, la figura más sólida que tienen para intentar dar nuevamente la pelea para la elección por venir, es Enrique Doger Guerrero, que sabe de política pero no ha podido conciliar al interior de los rijosos grupos políticos de su partido. Hasta Javier López Zavala quiere alzar la mano. No entiende que ni en su rancho de Pijijiapan podría ganar si lo eligieran dueño. En Puebla el PAN lleva ventaja... Ojalá y Claudia Shienbaum proceda en contra del senador Miguel Ángel Mancera luego de tantas irregularidades y desvíos que dice ir encontrando en el gobierno de la Ciudad de México.
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