Una de las frases más conocidas en la historia de la comunicación es de Goebbels, el comunicador de Hitler, “una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad” --un cabezal maneja “Juan Gabriel vive” y dentro de la nota dice, “en el corazón de todos los mexicanos”--, esto desprestigia al medio y hiere al lector.
En contraposición, Abraham Lincoln dijo: “Podrás engañar a todos durante algún tiempo, podrás engañar a alguien siempre, pero no podrás engañar siempre a todos”. ¿Cómo quieren ser recordados los medios?, como un nazi repudiado por el mundo o como un presidente con el prestigio que a la fecha tiene Lincoln?
-Publicar o difundir una noticia falsa, con el objetivo deliberado de engañar, es tan viejo como la mentira y los peligros que conlleva.
Como bien observó Lutero, la mentira es como una bola de nieve: cuanto más tiempo se le hace rodar, más grande se vuelve.
*No es nuevo, pero el fenómeno se desplaza a gran velocidad y tiene una enorme audiencia, en ambos casos gracias a las nuevas tecnologías.
El problema ha crecido tanto, que investigadores advierten que, “en unos cuatro años, al menos 50 por ciento de las noticias serán falsas. Y, esto, es proporcional a las ganancias que producen.
SIN EMBARGO, UN AXIOMA DE IMAGEN, UNA REGLA DE VIDA, ES QUE JAMÁS CAMBIES TU PRESTIGIO POR DINERO, PORQUE EL DINERO LO PUEDES OBTENER CON TU PRESTIGIO, PERO NO HAY TIENDAS EN LAS QUE TE VENDAN PRESTIGIO PORQUE ESTE NO TIENE PRECIO, ES ALGO QUE SE CONSTRUYE A TRAVÉS DEL TIEMPO Y SE DESTRUYE EN UN SEGUNDO.
Pero el impacto de las Fake news es profundo y tiene consecuencias inimaginables, ya si está a manos de una persona de a pie, y que desconoce el manejo que se debe dar a determinada situación, y peor si está en manos de un experto en la manipulación y el engaño, que tiene objetivos bien definidos para difundir, con toda intención, información falsa pasada como verdadera.
No me voy a perder en la cantidad de “Fakenews” que se han impulsad, porque no acabaría --menciono uno, el día que se cayó un helicóptero del gobierno del Estado de México y corrió la noticia de que en éste viajaba la secretaria de Desarrollo Social, cuando en realidad era el de Desarrollo Metropolitano–, pero es obvio que estamos frente a un problema en el que los propios medios de información, donde se supone que gente con la preparación y el conocimiento suficientes están al mando, son ya objeto de campañas pues se les acusa, sin razón, como promotores y difusores de “fake news”.
Esto va, claro, en detrimento del prestigio del medio, así como de los periodistas y personas que trabajan o colaboran en él. Pero eso es lo que menos les importa a personajes estilo Donald Trump, que es el que ha sobresalido por sus ataques a la prensa y varios medios de los Estados Unidos. Y haciendo Fake news se da cabida a estos personajes.
Sin duda, mucho tiene que ver uno de los males que acusa el periodismo de nuestro tiempo: la histeria por difundir primero antes que los demás y así ganar audiencia, tener más clic´s, más visitas, y con ello poder vender espacios de publicidad. Los medios son empresas, pero no se debe de ganar a costa de la credibilidad.
Confirmar cualquier clase de noticia, antes de su difusión, había sido una de las reglas más preciadas y estrictas en el ejercicio del periodismo; en las salas de redacción no se aceptaban “noticias” sin previa documentación o verificación. El “dicen que dijeron que dicen” no tenía cabida.
El “prontismo” llevó a Ignacio Ramonet a extender el certificado de defunción de los periodistas que, según expresó, han sido sustituidos por “instantaneías”, empujados por sus editores a ello, con tal de ser los primeros en difundir y ganar rating.
“El periodismo es la literatura con prisa”, anticipó en el Siglo XIX el poeta inglés Matthew Arnold, pero fue condescendiente porque hoy, justo por esa injustificada prisa, también son notables las faltas de sintaxis y de ortografía, los llamados “gazapos o dedazos”, con el “maldito duende” como chivo expiatorio de líneas deshilachadas e ideas que en vez de informar confunden, o simplemente no dicen nada. Ese duende sigue ahí, en muchos casos, no se asume la responsabilidad.
¡AQUÍ SUGIERO SER PUNTUAL AL DIFERENCIAR UNA CAMPAÑA DE UNA FAKE NEWS!
Los especialistas refieren que hay que tener claro que una cosa es la propaganda, sobre todo la que se despliega en procesos electorales, y otra muy distinta una noticia falsa, que no busca más que alterar los hechos y crear una realidad alternativa, apelando incluso a la denominada posverdad: “nuestra opinión vale más que los hechos”.
La propaganda, en la política, lo que pretende es convencer con propuestas, unificar a ciertos sectores o a todos en torno de ciertas ideas o causas.La noticia falsa es otra cosa: un relato que deforma y busca convertir una mentira en un hecho cierto a golpe de repeticiones.
So pena de concederle la razón a Napoleón, en el sentido de que si el cañón mató al feudalismo, no será la tinta la que mate a la sociedad moderna, como aventuró, sino la irresponsabilidad, el antiperiodismo y el mal uso de una de las herramientas más revolucionarias de las últimas décadas.
Nadie puede negar el progreso, tanto en velocidad como en oportunidad, casi al tiempo que suceden los hechos. La sociedad se ha armado con móviles que capturan instantes preciosos, pero el tratamiento informativo no es el adecuado ni completo.
¿Podemos hacer algo frente a las “Fake News” y evitar que, información falsa dé pie a nuevas invasiones del tipo Irak, Afganistán? ¿O que se distorsione lo que realmente sucede en Venezuela por codicia de su petróleo? ¿O los intereses del ejército inmiscuido en el narcotráfico?
SÍ. Y mucho, tan solo retomando las bases del periodismo –RECORDEMOS: EL PERIODISMO ES INVESTIGAR, PROCESAR Y PUBLICAR ¡INVESTIGAR! Hay que entender que la forma no sustituye nunca al fondo, no elimina lo básico ni lo necesario.
El desarrollo de las tecnologías de la Información ha sido maravilloso. Más de la mitad de los ciudadanos del mundo son usuarios de Internet, pero de ese mismo tamaño es la responsabilidad de quienes abrazamos el periodismo, procurando libertades, al ejercerlas de manera responsable.
*JORNADA DE PERIODISMO. Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UAEMex