Víctor Manuel Tinoco Vázquez, secretario de Acción Electoral del CDE del PRI, es uno de esos cerebros en materia político-electoral que tiene el tricolor en el Estado de México, pero que siempre están a la sombra. Es de esos que les llaman “operadores políticos de museo”. No es necesario que se muevan de su lugar para resolver problemas de grandes envergaduras. Estuvo muy cerca de Alfredo del Mazo Maza como candidato.
El Revolucionario Institucional no llegará a 2018 sin los partidos satélite. El propio Ernesto Némer Álvarez ha dicho que pronto iniciarán pláticas para definir la política de alianzas con el Panal, Verde Ecologista, Encuentro Social y Vía Radical (éste último recién creado). Asegura que no hay diferencias con el Panal, aunque la semana pasada Luis Castro estuvo en una reunión con los líderes nacionales del Frente Amplio (Dante Delgado, de MC; Alejandra Barrales, del PRD, y Ricardo Anaya, del PAN) solicitando su incorporación a éste.
Aquí es donde Tinoco Vázquez juega un papel relevante. Aquí es donde entra la acción electoral tricolor. Debe lograr que, por lo menos en el Estado de México, vayan con el PRI las fuerzas políticas que lo han acompañado en las últimas elecciones. ¿Cómo le hará Tinoco? Sólo él lo sabrá a ciencia cierta. Pero hay una polémica aún no definida, y que lanzó Morena hace poco a través de Ricardo Moreno, su representante ante el IEEM: que ni el Verde Ecologista, ni Encuentro Social, ni el Panal, tienen derecho a prerrogativas por los resultados obtenidos en la elección de gobernador.
Esta será una decisión que debe tomar el Consejo General del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM). Luego de que el Congreso local apruebe el presupuesto, el árbitro electoral puede sesionar para ajustar lo que le asignen y distribuir lo que corresponde a partidos. Hasta ahorita, el único en contra de que se les otorguen los recursos al Panal, Verde y PES, es Morena. El PRI podría oponerse también, aunque si son sus aliados, seguramente no lo hará.