Qué extrañas maldiciones se están viendo en esta vida, en este tiempo. Prende usted la televisión o lee los diarios, y hay muertos, o desaparecidos, o heridos; mujeres violadas, lastimadas (por los que más las deberían de querer y respetar…); porros-encapuchados apoderándose de las Prepas y Cch´s; y ahora con la novedad de que existe una Crown virus, que se adquirió del contacto del animal con el ser humano. Hágame usted el favor.
A los chiquitos en Guerrero, a los 6 añitos ya los está reclutando la policía comunitaria y los están adiestrando a defender, con las armas, su territorio. Cómo estarán de desesperados los adultos para tener que tomar esas medidas con sus niños. Triste.
Y mientras nosotros recibiendo miles y miles de indocumentados que están tratando de alcanzar el famoso “sueño americano”, aún a costa de sus vidas. Cruzan, se desesperan, tiran piedras, atacan, se defienden… vienen huyendo de lugares iguales o más peligrosos que el territorio mexicano.
Qué difícil vivir en México. A todo mundo que me encuentro y que conozco le han hablado para extorsionarlo. De cinco, a cinco.
Habrá que entender y apoyar a los incontenibles Sicilia y Le Barón, tratando de establecer la conciencia de los seres humanos, y acompañando a los que les han desaparecido a sus hijos. Por supuesto que empezando por ellos mismos. Qué tragedia. Grande y bien respetable caminata. Qué triste suena eso de: Vivos se los llevaron, vivos los queremos. Porque todos saben que están ya muertos.
Ellos rechazaron reunión con Olga Sánchez Cordero en Palacio Nacional, pues dijeron que: “No tenemos nada que hablar con el gabinete de seguridad”, después de la caminata que hicieron desde Cuernavaca “Por la verdad, la Justicia y la Paz…” El Presidente no los recibió.
Me gustaría ser una nigromante, maga apoyada por Circe, tratar de invocar a los espíritus de esos y millones de muertos más, mediante hechizos para que me digan qué va a pasar en este pobre México nuestro. Voltearlo al revés de como está ahora, y pedirle al universo entero, como adivina eterna, como en Persia, Eturia y Babilonia, su genial fortaleza para revertir, decía, la terrible circunstancia por la que está pasando este mundo, este continente, este México nuestro al que en verdad… amamos tanto. Hecho está…