El presidente Andrés Manuel López Obrador debe sentirse orgullo de que dos hijos del pueblo, y auténticos originarios del pueblo de Coacalco, están llevando a cabo puerta por puerta la promoción de sus logros y fomentando sus principios para combatir la corrupción. Se trata de los hermanos Mario y Edgardo Luna Olivares.
Los hermanos Edgardo y Mario Luna Olivares se han formado desde abajo, codo con codo, no sólo en campañas electorales sino también en trabajo comunitario de barrio con la gente de a pie llevando a cabo un sinfín de actividades que en otros entes políticos brillan por su ausencia. A estos últimos sólo se les conoce oportunistamente cuando se acercan las campañas o cuando los presentan en encuestas amañadas. Los hermanos Luna no porque siempre están presentes en las calles con la comunidad.
Edgardo y Mario no descansan ningún día. Incluso en días sábados y domingos o días festivos se les ve en plena actividad comunitaria. Este fin de semana dedicaron más de 48 horas, salvo la hora de alimentarse y dormir unas cuatro horas, a elaborar con un grupo de jóvenes, principalmente, una ofrenda colectiva en el Centro Cultural Balamk´Aan.
Pero no sólo es la hechura de una tradicional ofrenda con motivos el Día de los santos inocentes. Esta actividad para ellos tiene otro matiz y para la comunidad que los conoce otro significado pues con ella pretenden honrar a los desaparecidos políticos y a personas queridas por la comunidad que ya pasaron a mejor vida. Allí estará también la foto de mi entrañable compañero de Unomásuno y La Jornada, Jaime Avilés. Esto habla de una actividad de verdadera izquierda de los Luna Olivares para concientizar a la población.
Los hermanos Luna, destacados militantes del partido Morena, que fundo Andrés Manuel López Obrador, se han dedicado, durante casi una década a impulsar y a formar colectivos que tienen distintas disciplinas: entre ellos de arte, cultura, espectáculos, de formación legal y política, de actividades educativas, el colectivo de mujeres, y últimamente trabajan incansablemente por formar los comités de apoyo a mexicanos por la 4T.
Edgardo Luna fue precandidato en 2018 por Morena para la presidencia municipal de Coacalco, pero ganó la postulación el actual presidente municipal. Tanta es la fuerza popular de Edgardo Luna que cobardemente alguien lo mandó a golpear a tal grado que lo mandaron al hospital para que se desistiera de participar en el proceso electoral municipal.
Pero Edgardo Luna, además de llevar a la calle casa por casa los principios lópezobradoristas y sus logros de gobierno federal insiste en seguir su ejemplo de no arredrarse y luchará por ganar la postulación para llegar a la presidencia municipal de Coacalco y hacer realidad la máxima de no mentir, no robar y no traicionar.
¡Extra! ¡Extra!
Y sigue saliendo toda a podredumbre que dejaron ochenta años de gobiernos prianistas. En la presentación del informe de resultados de la Cuenta Pública 2019 entregado a la Cámara de Diputados, la Auditoría Superior de la Federación (ASF), salieron a relucir los cochupos que hubo con el llamado Seguro Popular, del que se dice que ni era seguro ni popular… y nuestro presidente López Obrador va contra el outsourcing que lastima laboralmente a las nuevas generaciones de trabajadores y la estabilidad de las familias que formarán el México post López Obrador. (El próximo domingo hablaré a fondo del outsourcing).
Por: Víctor M. Zendejas Orozco
Presidente de la ONG Franature.
