Apenas el 15 de enero pasado, Vanessa Rubio, entonces subsecretaria de Hacienda, hoy flamante coordinadora de la oficina del aspirante a la nominación del PRI para las presidenciales del primero de julio, dijo categóricamente en conferencia de prensa, que “no se puede extorsionar a la Secretaría de Hacienda por recursos que no corresponden conforme a la ley”.
Se refería la muy importante colaboradora del equipo de José Antonio Meade, a la demanda del gobernador de Chihuahua, Javier Corral, para que le entregaran los 700 millones de pesos por concepto de participaciones federales que la SHCP le tenía retenidos, según él, como consecuencia de haber emprendido una lucha contra la corrupción que llevó a la cárcel al ex –secretario adjunto del CEN del PRI, Alejandro Gutiérrez.
Días antes, el doctor en economía que despacha como Secretario de Hacienda, José Antonio González Anaya, había declarado que el problema con el gobierno de Chihuahua fue los 700 millones de pesos que le correspondían al estado norteño, que no se pagaron porque la cuenta de banco estaba mal.
Este sábado, Javier Corral salió de la Secretaría de Gobernación con la promesa de un pago, no de 700 millones de pesos, sino que de 900 millones de pesos que esta misma semana entrarán a las arcas del gobierno chihuahuense, que según la señorita Rubio "no corresponden conforme a la ley”. ¿Entonces quién viola la ley, Vanessa?
Si como se pactó el sábado, el gobierno de Chihuahua recibirá estos 900 millones de pesos entonces quiere decir que el gobierno de Enrique Peña Nieto cedió al chantaje de acuerdo a la percepción que tuvo del asunto la coordinadora de la oficina de Meade. Y todos ustedes saben que pasa con un gobierno que cede al chantaje. Esperemos que el vocero presidencial, Eduardo Sánchez, no nos salga con que fue lo mejor que le pudo pasar a México. Es capaz.
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Carlos Aguir Retes, quien ayer tomó posesión como nuevo arzobispo primado de México sería un papabili, término que se utiliza en Italia para identificar a los posibles sucesores del Papa en turno, en este caso del Papa Francisco, de quien el jerarca de la iglesia mexicana es muy amigo. Sería un segundo pontífice de origen latinoamericano. No lo pierdan de vista, aunque tendrá presiones de los grupos radicales de la iglesia que demandan aclarar los casos de pederastia que dejó pendientes su antecesor…En la Iglesia también hay agandalles, Norberto Rivera Carrera no entregó la casa oficial del arzobispado y Aguiar tuvo que ocupar otra…A Ernesto Nemer, se le hace agua el engrudo porque la selección de candidatos a presidentes municipales y diputados locales no salió como él y su jefe del gobernador del Mazo esperaba, tiene problemas en más de una docena de municipios y algunos distritos en donde no aceptan las imposiciones de la mafia de Atlacomulco a la que el presidente del PRI mexiquense responde…En mi próximo envío les comento del lastre que dejó Enrique Ochoa Reza a su salida de la Comisión Federal de Electricidad, lo de la indemnización y los taxis el juego de niños.
