Fue el primer acto público de la maestra Delfina ya, como gobernadora del Estado de México. El escenario: la casa club de Bosque Real, que según dicen los expertos, es la más grande y cómoda del mundo. Fue el pasado jueves 21.
No había más de 200 personas. Todos ellos empresarios que tienen inversiones trabajando y que son parte fundamental de la proveeduría del estado más importante del país. No discutamos, de uno de los dos que más gasta y que más produce.
Estaba perfectamente representada la comunidad judía, libanesa, española y obviamente la clase empresarial mexicana. Desde ese lugar, entre café y café, se veían caras de preocupación. Nadie sabía que iba a pasar y cómo iba a ser la nueva relación con los nuevos funcionarios. Eso sí, se admiraban los fairways y greens perfectamente podados.
Llegó la maestra acompañada de sus dos más cercanos camaradas y colaboradores: Horacio Duarte e Higinio Martínez. El líder del CCE, Francisco Cervantes, le presentó a los miembros del presídium. Sorprendió la presencia y convivencia con el diputado panista Enrique Vargas y la propia alcaldesa de Huixquilucan, Romina Contreras.
Primero habló el anfitrión: Marcos Salame, el Presidente del Consejo del complejo inmobiliario más grande y exitoso de América Latina. Le explicó de manera breve, pero concisa, cuántos empleos ofrecen y la cantidad de dinero que se había arriesgado. Le deseó el empresario, de manera muy caballerosa, mucha suerte en su tarea a la señora oriunda de Texcoco.
Después, con toda formalidad, habló el líder de la máxima cúpula empresarial: afortunadamente dejó el discurso a un lado, aventó las hojas, y dijo lo que se quería escuchar en ese foro: “señora gobernadora, aquí están los empresarios que quieren poner a trabajar su dinero, que quieren seguir invirtiendo, que desean crecer y que desean garantías para continuar con sus planes de expansión. A nombre de ellos le pido que exista desde hoy un puente de comunicación hasta la Plaza de los Mártires en Toluca”
Cuando tomó la palabra la gobernadora sorprendió a todos. Con cada frase se esfumaron las ideas de plantar maíz en los campos golf (juro que hubo esas bromas en las mesas), y en cambio, dejó en claro: “seré facilitadora de los negocios y las empresas, adiós a la corrupción y en esta nueva etapa nos irá muy bien a todos”.
Algunos no lo creían. A nadie vi que se pellizcara, pero seguro, más que uno lo pensó hacer. Estaban frente a la primera gobernadora de Morena, es decir, la primera no priista en casi 100 años y les estaba diciendo, adelante con sus inversiones, negocios y planes empresariales, sólo a cambio de un favor: denuncien a quien les pida dinero.
Y mientras todos le desean a ella que le vaya bien en su gubernatura, para que así le vaya bien al Estado de México, la sucesora de Alfredo del Mazo hizo un juego de palabras frente a los grandes dueños del capital: “yo quiero que les vaya bien a ustedes, porque así nos irá bien a los mexiquenses.”
Las caras de los empresarios al final de su discurso eran otras. El semblante de varios cambió. Ella se tuvo que ir al Palacio Nacional corriendo. Fue el día que el Presidente López Obrador reunió a los gobernadores para firmar un acuerdo de colaboración para intensificar la búsqueda de personas desaparecidas.
Se quedó a desayunar Horacio, Higinio y la secretaria de Desarrollo Económico, Laura González. La fruta y los huevos con machaca entraron mejor después del rápido encuentro. Los empresarios salieron contentos y entusiasmados.
Fue un primer encuentro muy positivo, porque se mandó un mensaje de paz para las mujeres y hombres que son patrones de decenas de miles de trabajadores.
Con Valor y Con Verdad.- La gobernadora de Aguascalientes, Tere Jiménez, llega al primer informe sin pelearse con la 4T, es de las mejores evaluadas del país, en uno de los estados más seguros, con los mejores stándares de salud, con educación de calidad y con récord empleos.
*Periodista, editor y radiodifusor
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