Ante la fracasada “estrategia de abrazos no balazos” implementada por el mandatario Andrés Manuel López Obrador desde el principio de su gobierno hacia el crimen organizado en todas sus modalidades, éste sigue avanzando a lo largo y a lo ancho de nuestro vapuleado país ante la impotencia de pobladores que en muchos de los casos han tenido que desalojar y emigrar de sus casas.
Pese a que el inquilino de Palacio Nacional afirme en sus nefastas conferencias mañaneras que los crímenes han bajado paulatinamente, la realidad es otra a la que nos enfrentamos los mexicanos ante el gobierno más violento en la historia moderna de la república con más de 175 mil asesinatos y aún le falta poco más de nueve meses para que se vaya. Pero el tabasqueño insiste que “vamos requetébien”.
Desafortunadamente, el viernes pasado se suscitó un enfrentamiento entre pobladores de la comunidad de Texcapilla en el municipio de Texcaltitlán, en el estado de México, hartos de ser extorsionados por miembros de la Familia Michoacana se unieron, se envalentonaron y se les enfrentaron con machetes y escopetas armándose la balacera, en la que resultaron asesinados 11 miembros criminales y tres civiles muertos que eran agricultores.
Se comentó que los extorsionadores cobraban un peso por metro cuadrado de siembra a cada campesino para permitirles cosechar. Por tal motivo los pobladores se negaron a pagar, desatándose el enfrentamiento, el municipio de Texcaltitlán se ubica a 46 kilómetros de Tejupilco, poblado de la Tierra Caliente que está en los límites con Michoacán y Guerrero y que fue visitado por López Obrador el sábado pasado pero que no se atrevió a declarar en contra del grupo criminal.
Los hechos se suscitaron en un campo de fútbol, debido a que los pobladores fueron a la cita con los delincuentes para entregarles el dinero, aunque solicitaron que les bajaran el monto de los solicitado pues no habían reunido el total de lo pedido y fue cuando el jefe de la plaza Rigoberto “N” conocido como “El Payaso”, no aceptó ninguna negociación y los amenazó con plagiar a pobladores en caso de no obtener el pago.
Debido a la negativa de los agricultores, miembros de La Familia realizaron disparos al aire, por lo que los pobladores no se amilanaron y se fueron encima de los líderes del grupo criminal, iniciando la balacera en la que cayeron muertos los 11 miembros de La Familia Michoacana.
Estos sucesos son deleznables, porque a pesar del número importante de miembros que poseen las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional, no han sido suficientes para enfrentar y ponerles un alto a estos delincuentes en todo el país, en donde la “estrategia” del tabasqueño ha fracasado rotundamente, por lo que los pobladores tuvieron que hacerle frente a estos malandros que siguen amedrentando a millones de mexicanos.
Por lo pronto, el crimen organizado La Familia Michoacana ya extendió su red a 25 municipios de la entidad mexiquense, como Tejupilco, Sultepec, Almoloya, Zacualpan, Texcaltitlán, Luvianos, Zacazonapan, Amatepec, San Martín Otzoloapan y Santo Tomás de los Plátanos, entre otros; la principal fuente de ingresos de los delincuentes es el cobro de piso a comerciantes, locatarios, agricultores y el narcomenudeo.
Asimismo, tienen el control de los precios de la canasta básica, como huevo, pollo y tortilla, además de los refrescos, cervezas, gasolinas y el gas L.P.
Es preciso mencionar que se tienen informes con cifras espeluznantes, y por favor, léalos con detenimiento -apreciable lector-, esta cifras que son espeluznantes: de acuerdo con el análisis efectuado a más de 50 documentos de inteligencia militar extraídos del hackeo que llevó a cabo el grupo Guacamaya, de los 2 mil 471 municipio que tiene México, ¡en mil 198!, se enlista por lo menos el nombre de un cártel, célula delictiva o banda criminal. ¡Datos aterradores!
A pesar de las declaraciones absurdas de Amlo en el sentido que el crimen organizado va a la baja y estamos mejor que antes, en el informe publicado en noviembre pasado del Índice Mundial del Crimen Organizado 2023, México ocupa el tercer deshonroso lugar con más crimen organizado en el orbe.
De igual manera en septiembre pasado, se publicó que el narcotráfico es el quinto empleador de nuestra república con un rango que oscila entre los 160 mil y 185 mil personas; se especifica que los grupos criminales alistan en su filas con promedio de 350 miembros semanalmente, de acuerdo a las conclusiones de un estudio del Complexity Science Hub de Viena, publicado en septiembre pasado.
Se informa que la única manera de frenar la violencia en nuestro país es dejando de reclutar los cárteles. Para llegar a esta conclusión, los investigadores se fueron a los datos de asesinatos, encarcelamientos, desapariciones y abandonos de las organizaciones criminales entre los años 2012 y 2022.
Se dice que, pese a que se encarcelan un promedio de seis mil delincuentes del crimen organizado anualmente, dichas organizaciones criminales han crecido desde hace diez años; es decir, dichos grupos criminales tienen en sus filas a 60 mil integrantes más que en 2012. La investigación también arroja resultados, que en 10 años el 17% de los reclutados fallecen por los enfrentamientos.
Por cierto, en su gira de trabajo por Guerrero el día de ayer, el inquilino de Palacio Nacional en sus absurdas e ilógicas declaraciones pidió a los padres “darles mucho amor a los jóvenes para evitar que se unan a la delincuencia. Hay que cuidar mucho que no haya consumo de droga, porque tenemos que combatir el narcotráfico y esto que está pasando que ayer (el viernes) se dio en el Estado de México, la extorsión, el llamado pago de piso, todo eso lo tenemos que combatir, pero entre todos” (¿?).
Así pues, ahora resulta que todos los mexicanos tendremos que combatir al crimen organizado, gracias a las ocurrencias de López Obrador, pues las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional, no han podido ni podrán hacerle frente a los distintos grupos criminales, el gobierno de la autollamada cuarta transformación ha sido omiso, inepto, complaciente y condescendiente con estos grupos armados que tienen azotada a nuestro vapuleado país.
El crimen organizado se fortalece todos los días, avanza a paso firme diariamente y no hay quien lo detenga, su modus operandi es a cualquier hora del día en gran parte del territorio mexicano debido a la fracasada estrategia de abrazos, no balazos, que implemento Andrés Manuel López Obrador desde el inicio de su fallida cuarta transformación.
Lamentablemente, el escenario sigue descomponiéndose, vamos en franco retroceso, no existen las mínimas garantías de seguridad de parte de la administración morenista para los más de 129 millones de mexicanos.
Requerimos urgentemente un cambio de régimen, un viraje de timón, es necesario un gobierno que sea encabezado por una persona que ame profundamente a México, que tenga vocación de servicio y que no esté en contubernio con los grupos criminales, que brinde los mínimos de bienestar a todos los habitantes, a una persona que ame profundamente a México y esté decidido a sacarlo adelante.
