Sin lugar a dudas, el mandatario Andrés Manuel López Obrador, cerrará su sexenio implantando su tan anhelada y ambicionada dictadura, gracias al sometimiento inaudito y obediencia total de siete los magistrados del Instituto Nacional Electoral (INE), y cuatro del Tribunal Federal del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), quienes con ocho días de diferencia dinamitaron democracia al otorgarle a Morena y sus rémoras del PT y PVEM, una sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados con 365 de las 500 curules totales.
Nuestra de por sí endeble democracia mexicana fue enterrada gracias al sometimiento de siete de los once consejeros electorales del INE, encabezados por la morenista presidente Guadalupe Taddei Zavala, Carla Astrid Humphrey Jordan, Norma Irene de la Cruz Magaña, Uuc-Kib Espadas Ancona, Arturo Castillo Loza, Rita Bell López Vences y Jorge Montaño Ventura; así como cuatro de los cinco magistrados del TEPJF, Mónica Aralí Soto Fregoso, Felipe de la Mata Pizaña, Reyes Rodríguez Mondragón y Felipe Alfredo Fuentes Barrera, quienes pasarán a la historia como los peores consejeros que hayan tenido ambos organismos debido al miedo e incondicionalidad que tuvieron hacia el inquilino de Palacio, quien en seis años se encargó de despedazar a nuestro ya de por sí vapuleado país.
Janine M. Otálora Malassis, fue la única magistrada que tuvo el valor y votó en contra de la dictadura, defendiendo a carta cabal la frágil democracia al expresar “el traspaso de los votos de Morena a sus aliados distorsiona el voto popular”.
Es preciso citar que el PT y Morena, realizaron una coalición perversa, de una auténtica mafia, un acuerdo clásico del agandalle, repartiéndose los sufragios como si fueran los descubridores y los dueños de la democracia.
Cabe señalar que Felipe de la Mata Pizaña, fue quien preparó el terreno para que las 200 diputaciones plurinominales fueran repartidas indebidamente por partido y no por coalición, la orden del autoritario interpretando el artículo 54 Constitucional de acuerdo como le indicaron desde Palacio Nacional y no de la manera correcta, pues es muy claro dicho artículo que indica que la representación de cada partido, no debe rebasar el 8 por ciento de la votación emitida a cada partido, importándole un carajo lo ordenado por nuestra Carta Magna.
De igual manera, Mónica Aralí Soto Fregoso, se hizo la víctima, se puso la playera guinda en dicha sesión pues defendió a capa y espada a Morena y sus rémoras del PT y PVEM, en su mentirosa ponencia justificó la votación a favor de Morena, “no nos estamos robando el voto de la oposición, -mintió- todos los votos valen lo mismo, -volvió a mentir- no se está destruyendo la democracia ni la pluralidad, cinismo desbordado de Soto Fregoso, quien junto con sus otros tres magistrados, son cómplices y responsables de haber dinamitado la democracia.
Reitero, los cuatro magistrados arriba mencionados, obedecieron de hinojos y sin hacer ningún comentario en contra al tabasqueño, para darle a Morena y sus rémoras, todo el poder para imponer la dictadura que persiguió Andrés Manuel López Obrador. Adiós a nuestra democracia. ¡Vergonzoso e indignante!
De esta manera, la LXVI Legislatura Federal tuvo su primera sesionó ayer domingo y comenzará a acabar de desaparecer los organismos autónomos, además de aprobar la perversa, absurda y retrógrada reforma judicial que acabará con la separación de los tres Poderes de la Unión de los que estaba constituido nuestro vapuleado país.
EL PVEM DE RODILLAS ANTE MORENA
Como era de esperarse, a tan solo una hora de haberle regalado inconstitucionalmente 71 diputados plurinominales, el Tribunal Federal del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), (el miércoles pasado), porque solamente ganó 6 distritos electorales, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), postrado de hinojos ante Morena, le regresó 11 legisladores de extracción guinda para sumar 251 diputados como grupo parlamentario y asirse de la Mesa Directiva durante los tres años de la LXVI Legislatura Federal.
Los más que acuerdos en lo oscurito, sino que es obediencia total a las instrucciones de los morenistas, las “convicciones” de los dizques ecologistas cimbraron a millones de mexicanos que comprobaron una vez más el ajo y ruin nivel que tiene la política nacional, al regresarles los 11 diputados.
Es indignante que el TEPJF les haya dado obsequiado 71 diputados sin haber obtenido la suficiente votación nacional para ganarlos. Fue simplemente que los magistrados obedecieron fielmente las instrucciones de su jefe Amlo.
Así pues, pese a los excesos de poder, de su soberbia, de su ineptitud y una larga lista de yerros, Andrés Manuel López Obrador cierra su gobierno fallido, teniendo a sus pies a sus vasallos e incondicionales de legisladores de Morena, del PT y del PVEM las Cámaras de Diputados y Senadores, respectivamente, para hacer y deshacer a su antojo nuestra Constitución y darle paso a la dictadura de su sucesora Claudia Sheinbaum, quien deberá distanciarse del tabasqueño para darle un viraje de 360 grados a las políticas públicas y a un nuevo proyecto de Nación ya que de lo contrario cometerá los mismos errores de su antecesor o tal vez más y acabará de hundiendo a nuestro querido México.
JAIME PORTILLO, NO PAGA Y SE ESCONDE
Jaime Portillo, quien se presentaba como “funcionario” de la administración que encabeza Angélica Moya en Naucalpan, ofreciendo “sus servicios” para resolver asuntos y trámites de empresarios e inversionistas, solicitando fuertes sumas de dinero para adelantar dichos asuntos, fue despedido en abril pasado por realizar estas pésimas y deshonestas prácticas.
Su actitud es la de esconderse y no dar la cara para devolver el dinero pedido, lo reprobable, es que ni siquiera es capaz de contestar las llamadas ni los mensajes de las personas a las que les adeuda. Este sujeto no debe ser contratado por ningún ayuntamiento ni tampoco por alguna empresa privada debido a su deshonestidad y sus malas s prácticas.