Toluca/Estado de México
Ante el incremento de casos de COVID-19 y la ocupación hospitalaria en el Estado de México, se ha complicado el traslado de pacientes con sintomatología grave a hospitales en los que puedan ser atendidos, pues tardan hasta ocho horas en recibir atención al no encontrar una cama disponible.
En entrevista Francisco Javier Rodríguez Abarca, coordinador estatal de socorros de la Cruz Roja Mexicana en la entidad, explicó que para evitar la postergación de la atención de los pacientes contagiados procuran realizar traslados asegurados, es decir, buscan la recepción del paciente en algún hospital que tenga camas disponibles o en el hospital del que es derechohabiente.
Precisó que la recepción de los pacientes en los nosocomios puede ir de 30 minutos hasta ocho horas, tiempo en el que el paciente permanece en espera hasta que es ingresado y recibe la atención requerida.
“No tenemos un tiempo estándar, ya rompimos un récord de recepción de hasta ocho horas para que nos reciban a un paciente en el hospital por la saturación que tienen, ahorita son más entradas que salidas y mientras esperamos les brindamos la atención que requieran como oxigenoterapia”, comentó.
Abundó que, en este tiempo de espera no solo puede empeorar la salud del paciente, sino que también les genera angustia y ansiedad permanecer por un tiempo prolongado dentro de la cápsula en la que son traslados.
Finalmente, precisó que la situación se presenta tanto en el Valle de México como en el Valle de Toluca, en este último principalmente en el Centro Médico del ISSEMyM debido a la saturación del hospital. Incluso, abundó, han encontrado filas de ambulancias para que reciban a los pacientes y la atención es según el orden de llegada.