Toluca/Estado de México
Majo Osorio Rosas llega nuevamente a la Legislatura de Quintana Roo, representando al distrito X en Solidaridad, con cabecera en Playa del Carmen; esta vez lo hace como diputada de mayoría relativa y siendo la más votada. Con un montón de proyectos bajo el brazo y todo el apoyo de la gente, seguirá trabajando arduamente.
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En entrevista para DigitalMex, nos contó un poco sobre su vida personal, sus sueños, tanto personales, como profesionales. En una amena conversación nos habló de la importancia que ha tenido a lo largo de su vida su madre para ella, ya que siempre fue una luchadora social, la cual le enseñó a trabajar de manera colaborativa con todas las personas que tenía alrededor, pues hacer una red de apoyo es importante al momento de realizar cualquier actividad.
“Ella lo hizo en Campeche yo lo hago, acá en Playa del Carmen, donde he echado raíces con mi propia familia”.
Su madre es su inspiración para trabajar en el espacio público, ya que con su ejemplo le demostró desde muy chica que se pueden hacer las cosas bien.
“Me inculcó el amor al prójimo, el cuidado por el medio ambiente y por su tierra”.
Heredera de la sólida tradición política, y ahora bajo la tutela y mentoría de Mauricio Góngora, Osorio ha aprendido que las cosas se pueden hacer de manera diferente y sin poner pretextos.
“En esta labor debes estar dispuesta a construir de la mano de la gente”, aseveró. “Me gusta hacer equipo con y para los playenses, porque es la única manera de hacer y contribuir a la ciudad en la cual están creciendo mis hijos. Quiero hacer de Playa del Carmen ese lugar en el que todos sueñan, no solo para los que viven aquí, sino para todos los que la visitan o quieren echar raíces”.
Este ímpetu lo trae desde joven. Cuando era estudiante tocaba el bajo y andaba en patineta, inquieta, pero estudiosa y curiosa. Era de las niñas que sacaban diez, siempre concentrada en sus objetivos, con base en esa experiencia considera que la única manera de reconstruir el tejido social es la educación.
Educación que no solo se imparte en las escuelas, sino la más importante, la que se da en familia, “porque ahí es donde se educa verdaderamente”; para ella el avance de este rubro es fundamental. Considera que a pesar de la historia que tengamos, es necesario que se ponga más atención al aspecto emocional. Detectar a tiempo los focos rojos, para poder ayudar a todos aquellos que requieren apoyo para no abandonar la escuela o incluso para detectar violencia intrafamiliar o intentos de suicidio.
Para Majo Osorio es importante y urgente generar comunidad, conocer todo lo que nos rodea y respetarlo.
“Soy una diputada de territorio. El puesto es prestado. Soy esa voz, que gestiona y no dejaré de serlo. El trabajo está en la tierra, en escuchar al ciudadano, porque cada sentir es diferente, cada colonia tiene su particularidad”.
Confía plenamente en que se está generando la semilla del cambio y lo ve en los que vienen trabajando detrás de ella. Por ello, se le debe dar oportunidad a las nuevas generaciones, ya que son generadores de esos cambios que tanto se esperan.
Su vocación por el cuidado del medio ambiente, ha estado presente desde pequeña, su inquietud por el cuidado y conservación de plantas y animales la han llevado a desarrollar propuestas de sostenibilidad (como la instalación de paneles solares en edificios públicos), en ese sentido el Verde Ecologista ha sido un partido a afín a sus ideales y creencias, además que siempre les da oportunidad a los jóvenes.
En la diputación plurinominal aprendió a hacer bien su trabajo, sin descuidar a su familia. Tiene muy claro que quiere estar cerca de sus hijos porque están en crecimiento. En la XVII Legislatura se dedicó a gestionar, hacer trabajo en equipo. Legislar, también implica cabildear, escuchar.
Se dio cuenta de varias cosas que le hacían ruido y que ella podía ayudar a legislar en esas materias. Uno de los primeros puntos fue tipificar el cobro de piso, debido a que era una petición general de los empresarios que se sentían vulnerables ante el crimen organizado. La otra fue lograr que hubiera un lactario en el Congreso, señala que fue un trabajo en conjunto con el diputado Gilberto Aldana de Morena.
Osorio sigue comprometida con su gente. Ella creció en un Playa del Carmen, donde podía dejar la puerta abierta y caminar tranquilamente y eso es lo que quiere conservar, además de la esencia del lugar, respetando la armonía del entorno.
“Rescatar esa parte de comunidad, impulsando leyes que nos ayuden a reconstruir lo que esta mal, sigo trabajando en tierra; he sido la candidata más votada gracias a que la gente siempre me da su respaldo porque los escucho, mi compromiso es con ellos, sigo visitando los tianguis y conociendo el sentir de cada uno ya que las necesidades cambian en cada rincón”.
Entre sus planes actuales está el darle continuidad al programa “Vigilante Ciudadano” que se implementó hace diez años en Solidaridad, el cual consiste en que personas de la tercera edad cuiden las escuelas. Dicho programa ayuda a que los adultos mayores se sientan productivos y los niños más tranquilos y cuidados.
La gestión política de Osorio destaca por diversos aspectos, pero llama poderosamente nuestra atención su capacidad conciliatoria, su agudeza política, su visión de estado y su sólida formación.
María José Osorio, conocida por sus amigos como “Majo”, son referentes en la política estatal, donde junto con otras mujeres como la gobernadora Mara Lezama y las diputadas Tepy Gutiérrez y Lilia Inés Mis Martínez, están demostrando que se puede gobernar diferente, en favor de la población.
Hoy como diputada refrenda su compromiso con la ciudadanía, aunque sueña con ser alcaldesa de Playa del Carmen en algún momento, porque es su casa y quiere que las niñas y adolescentes tengan un mejor futuro.
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