San Salvador Atenco/Estado de México
Presuntos militantes del PRI, entre ellos hijos del candidato a la alcaldía de esta localidad, atacaron a balazos el automóvil de Hugo Reyes Núñez, abanderado de Morena y virtual ganador de la contienda por la presidencia municipal, y se dedicaron a golpear a taxistas y empleados de tiendas de conveniencia.
Los hechos sucedieron ayer por la tarde-noche y ante la supuesta falta de atención de las autoridades ministeriales para tomar carta en el asunto, militantes de Morena, muchos de los cuales lo son también del Frente del Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT), se apostaron frente a la alcaldía para reclamar la acción de los simpatizantes del PRI y la postura del agente del ministerio público de Texcoco.
De acuerdo con versiones de personal del Centro Avanzado de Atención Primaria a la Salud (CEAPS), ubicado sobre la Avenida Nacional, ayer por la tarde escucharon varios disparos de arma de fuego y se atrincheraron en el interior del inmueble.
Testigos narraron que la agresión estuvo presuntamente encabezada por Alejandro Santiago, conocido como “El Oaxaco”, candidato del PRI a la alcaldía, quien circulaba en uno de cuatro autos y era acompañado por sus sobrinos.
A decir de los denunciantes, el abanderado tricolor y sus familiares llegaron a una tienda, cerca de un establecimiento con razón social “3B”, esto sobre la carretera Texcoco-Lechería, donde golpearon a un empleado, identificado como Antonio Altamirano, fracturándole la nariz.
Luego se trasladaron a la base de taxis ubicada en la entrada de San Salvador Atenco, donde arremetieron contra taxistas, lesionando a uno conocido solo como el “Pecas” y otro como Jorge.
Mientras supuestamente golpeaban a los taxistas, Alejandro Santiago ordenó quitarle el celular a una trabajadora de la fonda ubicada al lado de la base de taxis, quien tomaba fotografías de la agresión, y en ese momento pasó un auto particular que trato de auxiliarla.
Empero, cuando el automovilista intentó acercarse para ayudar a la trabajadora de la fonda, los “oaxacos” lo encañonaron, abordaron sus vehículos y desde lo lejos tiraron bala contra el auto que trataba de ayudar, para luego huir del lugar, encaminándose hacia el pueblo.
Ante estos hechos violentos, las campanas de la iglesia comenzaron a sonar, y decenas de pobladores se congregaron en la explanada municipal, donde denunciaron los hechos a las autoridades locales quienes, aseguraron, “bajo argumento de que no había a nadie a quien agarrar, no hicieron nada”.
Luego se dirigieron a las instalaciones de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) con sede en Texcoco, pero tampoco les hicieron caso.
Ante ello, esta mañana decenas de simpatizantes de Morena se congregaron frente a la alcaldía, advirtiendo que no van a dejar pasar estas agresiones, esperando que las autoridades ofrezcan una respuesta y se aplique la ley.
