Melchor Ocampo/Estado de México
Familias, amigos y vecinos de la niña Valeria Rivera Romero, de 12 años de edad, la acompañaron a su última morada, con la exigencia de que su asesinato no quede impune, se capture y sancione a los responsables.
La menor fue despedida con un misa de cuerpo presente en la iglesia de Santa María de la Visitación, en el poblado del mismo nombre, y después trasladada al cementerio de la comunidad.
Como se recordará, Valeria desapareció el pasado domingo por la tarde en la colonia El Mirador, en el poblado Visitación, cuando fue a realizar algunas compras a la tienda, ubicada en la calle Tlacotepito, pero ya no volvió a su domicilio.
Según las primeras versiones, un hombre de complexión delgada y vestido de negro se la llevó, aunque los familiares aseguran que fue obligada a subir a un vehículo y que de ello consta un video.
Un día después de su desaparición y de la búsqueda tanto por sus familiares como por las autoridades, que emitieron un boletín de ayuda para localizarla el mismo día de los hechos, la menor fue hallada sin vida en un predio ubicado en la parte trasera de una templo de los Testigos de Jehová, ubicado en la Avenida del Trabajo esquina con Mario Ramón Beteta, a unos 200 metros del sitio de donde supuestamente fue abordada por un desconocido.
Los familiares y amigos, así como vecinos, exigieron a las autoridades el esclarecimiento de los hechos para que los responsables no se queden sin castigo, al tiempo de demandar mayor seguridad en sus comunidades.