Mafalda, “la niña filósofa”, creación del humorista gráfico argentino Joaquín Salvador Lavado, Quino, cumple hoy 53 años. Sus ideas de lograr un mundo mejor, cinco décadas después, siguen presentes en el imaginario colectivo.
Mafalda concientiza, Mafalda instruye, Mafalda despierta conciencias. Es una niña normal, tiene amigos, juega con ellos, pero en todo momento envía sus mensajes, sueña con un mundo mejor. Baila, canta canciones de los Beatles. Es el brillante pensamiento de Quino en una mente infantil.
La tira de Quino ha fascinado a generaciones y generaciones. Desde niños, jóvenes y adultos, que ríen o aluden a un chiste sarcástico de Mafalda o algunos de sus amigos, Felipe, Manolito, Libertad, Miguelito o Susanita. Mafalda representa la voz de la conciencia no escuchada por los adultos.
El 29 de septiembre de 1964 salió a la luz en el semanario Primera Plana, la primera edición de la tira cómica que ha sido traducida a más de 30 idiomas.
El personaje nació antes, cuando el humorista Miguel Brascó, solicitó a Quino –que llevaba más de diez años realizando humor gráfico- que realizara un trabajo para una agencia de publicidad.
"En realidad Mafalda iba a ser una historieta para promocionar una línea de electrodomésticos llamada Mansfield. La agencia Agnes Publicidad le encargó el trabajo a Miguel Brascó, pero como él tenía otros compromisos, me lo pasó a mí. Esto fue en 1963. Pero la campaña nunca se hizo y las 8 tiras que dibujé quedaron guardadas en un cajón", ha declarado su creador en varias ocasiones.
Mafalda una niña de seis años de edad, arquetipo de la clase media latinoamericana y de la juventud progresista, representa la aspiración idealista y utópica de hacer de este, un mundo mejor, no obstante, tiene que lidiar con el pesimismo y la preocupación debido a las circunstancias sociopolíticas que aquejan al planeta. Pero nunca se da por vencida, y sigue y sigue.
De forma sarcástica Mafalda aborda los grandes problemas existenciales y mundiales, con temas como la maldad y la incompetencia de la humanidad, así como la ingenuidad de las soluciones propuestas para los problemas como el hambre y las guerras, revelándose siempre contra el mundo legado por sus mayores. Sus padres y sus amigos son siempre el primer blanco. De ahí se eleva al panorama nacional y luego al mundial.
Amante de Los Beatles, el Pájaro Loco y los panqueques, aborrece, como muchos niños, la sopa. Suele incomodar a los adultos con cuestionamientos sobre lo socialmente establecido y el manejo político del mundo. No mide la magnitud de sus preguntas. Está convencida del progreso social de la mujer y lo preconiza. Sueña con estudiar idiomas y trabajar como intérprete en las Naciones Unidas para contribuir a la paz mundial.
En un principio, en la tira cómica solo aparecía Mafalda con sus padres, pero con el tiempo Quino agregaría personajes como Felipe, Manolito, Susanita, Miguelito y Libertad, y su hermano Guille, quien de recién nacido representa a la burguesía. Luego un rebelde sin aparente causa.
Pese al gran éxito del que gozaba, la última aparición de Mafalda fue en 1973 en una tira publicada en el semanario Siete Días. "Dice el director que bueno, que a partir de hoy podemos darles un descanso a los lectores, pero que, si alguno de nosotros se mudara, trasladara o apareciera en otra revista o diario, él a patadas nos agarraría”.
Tiempo después surgieron algunas apariciones de Mafalda, pero fueron discontinuas, algunas para campañas sociales o como un presente de Quino hacia sus amigos. Pero Mafalda cumple 53 años, sigue siendo esa niña que sueña con un mundo mejor. Los problemas sociales, las guerras, los juegos, todo sigue siendo igual, sus ideas permanecen.