Curiosamente… Entre las piedras mágicas que existen alrededor del mundo, la Moldavita se conoce por ser especialmente rara por su origen extraterrestre y sus propiedades esotéricas.
La Moldavita es el resultado del choque de un meteorito, proveniente de la constelación de Orión, en la tierra hace aproximadamente 15 millones de años. El impacto y la presión que este ejerció, fusionó los minerales terrestres, resultando en un cristal de una tonalidad verde intenso.
Se sabe que este meteorito cayó en lo que hoy se conoce como el Valle del Río Moldau, al norte de Praga en la República Checa, y de este lugar toma su nombre.
A pesar de ser probablemente una de las gemas mas escasas de la tierra, desde tiempos muy antiguos se le dio un gran valor. Se cree que se usó en amuletos desde la prehistoria, y se encontraron algunas de estas piedras en la estatua de Venus de Willendorf (Austria), creada hace cerca de 29.000 años.
Ha sido encontrada en las grandes pirámides y tumbas de Egipto; también en coronas de la realeza en Europa donde, hasta el día de hoy, se usa como un regalo muy especial de parte de los reyes para los reyes.
Existe la leyenda que cuenta que, en realidad, el Santo Grial no era de oro sino que fue formado de esta piedra verde que cayó de la corona de Lucifer cuando descendió del cielo al infierno; así que también representa el poder angelical que Lucifer poseía antes de caer en desgracia debido a sus ambiciones.
Además de ser una hermosa piedra de un origen misterioso que siempre ha atraído al hombre, la vibración energética que se le atribuye a este cristal va desde la creencia de que tiene la propiedad de acelerar la evolución espiritual de quien la posee, elevar niveles de conciencia, ayudar a conectar con la esencia del ser. Incluso en las personas menos sensibles a la energía de las piedras, la Moldavita puede activar el sistema de chakras, deshacer las limitaciones que hemos puesto en nuestra vida y lanzarnos al camino espiritual.
Dormir en contacto con esta gema activa el estado del sueño.
Finalmente hay quienes dicen que en realidad la Moldavita no se busca sino es ella quien encuentra. ¿Lo crees?
