Toluca/Estado de México
Durante el Foro Extrema Pobreza, Política Social, la Directora de “México Evalúa”, Mariana Campos Villaseñor, explicó que la pensión universal no es negativa, sino por el contrario, aunque el problema radica en que, con recursos limitados, es crucial garantizar que los más vulnerables sean quienes realmente reciban el apoyo.
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Tras advertir que los problemas actuales de la Pensión para Adultos Mayores, son un “foco rojo” en la inversión social en México, dio a conocer los desafíos y riesgos que enfrenta la inversión social en México, particularmente en lo que respecta a las pensiones para adultos mayores.
Indicó que aunque la inversión social es aparentemente elevada, es esencial desglosar y entender cómo se están utilizando estos recursos y cuál es su impacto real en la sociedad.
Los puntos críticos destacados por Campos es el volumen significativo de recursos destinados a pensiones, que asciende a 1.2 billones de pesos, representando el 40% del total de subsidios. Este enfoque, según la directora de México Evalúa, podría estar desatendiendo la necesidad de financiar otros servicios públicos vitales como la salud y la educación, lo que plantea un reto considerable para el gasto social del país.
La especialista indicó que el 42% de los subsidios y transferencias del gobierno se destinan al programa de pensiones, lo que considera un "pasivo social" para México.
La experta alertó sobre el peligro de descuidar la inversión en la infancia y adolescencia, calificando esta situación como un "foco rojo" en el desarrollo social, dado que la falta de inversión en estas etapas podría generar serias consecuencias a largo plazo.
Dio a conocer que la universalización del programa de pensiones, que otorga beneficios a cualquier persona que cumpla con el requisito de edad sin considerar su nivel de ingresos o su situación en el esquema de seguridad social formal, ha debilitado la progresividad del programa y dijo que comparado 2016 con 2022, se ha observado una disminución significativa en el porcentaje de personas atendidas por este programa.
Dijo que el gasto de bolsillo en salud pasó de 1,028 pesos en 2018 a 1,345 pesos en 2022, un incremento que puede llevar a situaciones catastróficas para muchas familias.
Indicó que en 2022, más de un millón de hogares incurrieron en gastos catastróficos en salud, lo que representa un aumento de más del 50% respecto a 2018.
Finalmente, en el ámbito educativo, aunque el gasto se ha mantenido progresivo, destacó una ligera pérdida de progresividad, advirtiendo que la falta de inversión en capital humano podría exacerbar la pobreza en el futuro.
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