Estado de México
“Las y los niños, no deberían vivir en prisión”. Esa fue una de las conclusiones en la que coincidieron especialistas en derecho durante el segundo día del Congreso Internacional “Infancias con Referentes de Crianza en Prisión”, al señalar que la sociedad en general, es responsable de los menores que se desarrollan al interior de las cárceles.
Reflexiona Poder Judicial del #Edoméx sobre infancias criadas en reclusión
Durante las mesas de trabajo que se llevaron a cabo, con 10 ponencias, se discutió la urgencia de implementar políticas que protejan a niños y niñas que viven en prisiones debido a la reclusión de sus madres, un tema que ha alcanzado una especial relevancia en el Estado de México.
Actualmente, 22 menores viven con sus madres en ocho cárceles del estado, una situación que plantea desafíos significativos para su desarrollo y derechos, y que exige una revisión de las condiciones que enfrentan en reclusión y de la estructura de apoyo disponible para ellas y sus madres.
En la mesa titulada La Experiencia de Maternidades y Paternidades en Prisión, los participantes destacaron la necesidad de abordar temas como la legalización del aborto y la promoción de nuevas masculinidades.
Aborto legal
En esta mesa se desarrolló el tema de Derechos de las Madres Privadas de la Libertad y de las Infancias con Referente de Prisión a Cargo de los especialistas: Luis Alfonso Guadarrama, Carlos González y Alma Lilia Díaz Martínez, Antonio Quintero Zamora y Sandra Padilla García.
En ésta comentaron que además de que ningún infante debería vivir en prisión, tampoco deberían ser separados de sus padres, por lo que una de las políticas urgentes de las que se da cuenta con esta problemática es la legalización del aborto para que las madres en estas situaciones jurídicas decidan sobre su cuerpo.
“Es necesario generar leyes y capacitaciones que permitan asegurar que los niños no vivan dentro de las prisiones, pero tampoco sean separados de sus padres”, afirmaron los expertos.
Nuevas masculinidades
También se abordó el tema de la maternidad en prisión. Salud Física y emocional en la que participaron Martha Isabel Ángeles Constantino y Laura Elizabeth Benhumea González, así como Abraham Osorio Ballesteros, Felipe González Cruz y Dulce Reyes Gutiérrez.
En esta destacó el rol de los padres en el contexto de reclusión, con el propósito de fomentar “nuevas masculinidades que promuevan una paternidad afectiva y participativa, lejos de estereotipos de masculinidad que limitan la expresión de emociones”.
Según los especialistas, esta transformación es esencial para asegurar que los padres en reclusión también puedan tener un vínculo saludable y positivo con sus hijos, aun en un entorno de separación.
Además, se subrayó la necesidad de reestructurar los procesos de salida de los menores hacia entornos más seguros, pues según las observaciones en los centros penitenciarios del Estado de México, el procedimiento para ubicar a los menores con familiares u hogares adecuados puede llevar más tiempo del necesario.
En muchos casos, señalaron, los menores que salen de prisión quedan bajo el cuidado de abuelos o familiares en condiciones de pobreza, lo que afecta su desarrollo físico y emocional.
Por ello, los participantes propusieron “mejorar los procesos y los recursos destinados a la reintegración de los menores en entornos familiares adecuados”.
Este congreso busca influir en la creación de políticas que respondan a las necesidades de las infancias y las paternidades dentro de contextos de reclusión, proponiendo que estas intervenciones puedan trascender el ámbito penitenciario y brindar mejores perspectivas de vida para quienes atraviesan estas circunstancias.