Toluca/Estado de México
En lo que va del año, las unidades especializadas de los hospitales “Dr. Nicolás San Juan” y “Regional de Alta Especialidad de Zumpango”, atendieron 27 niños con quemaduras relacionadas con pirotecnia, informó el Instituto de Salud del Estado de México.
En diciembre de 2017, la unidad localizada en Toluca, destinada a menores, atendió a 20 pequeños con quemaduras de diversos grados ocasionadas por varios motivos.
Mientras que la de Zumpango, en diciembre de 2017, atendió a una persona con abrasiones relacionadas con pirotecnia; a lo largo del presente año fueron atendidos 130 pacientes.
Según el ISEM, las causas más comunes de quemaduras en niños, son en 70% por escaldadura, que es el contacto con líquidos calientes, principalmente en menores por debajo de los siete años de edad, además de la exposición a llamas o quemaduras por fuego.
En los adultos, especialmente en edad productiva, son las quemaduras por electricidad que también en los pequeños se presentan pero en menor proporción.
Las recomendaciones son evitar que los niños estén cerca de donde se cocina o de objetos y líquidos calientes.
Colocar las ollas en las hornillas traseras de la estufa para evitar que los alimentos o líquido caliente se puedan derramar encima de los menores.
Evitar que los niños manipulen fuegos artificiales, en caso contrario, deberán ser supervisados por un adulto en todo momento.
Por su parte, el Instituto Mexiquense de la Pirotecnia (Imepi) recordó a la población que la pirotecnia no es un juguete, por lo que no pueden ser manipulados por niños sin la supervisión de algún adulto responsable.
Entre las indicaciones que realiza el Imepi se ubica el lanzamiento de cohetones y la quema de castillos. En el primero de los casos, se advierte que el lanzador responsable y sus operarios establezcan un radio de seguridad en donde se deben colocar las herramientas del lanzamiento del cohetón.
En el área de lanzamiento de éste, sólo permanecerá el lanzador responsable y sus operarios; asimismo, deberán colocar letreros en el entorno, indicando que es una zona restringida y de peligro.