Toluca/Estado de México
Luego de 14 años de litigios entre la comunidad de San Francisco Xochicuautla en Lerma y el gobierno del Estado de México, para impedir la construcción de la autopista que conectará Naucalpan con el acceso principal al Aeropuerto Internacional de Toluca, a partir de esta semana reiniciará la obra a la que únicamente le faltan cuatro kilómetros.
Para concluir esta vialidad, los gobiernos federales y estatal, además de la empresa constructora se comprometieron a entregar un porcentaje del peaje para un Fideicomiso durante los 30 años que dure la concesión, para el desarrollo de proyectos productivos de la comunidad.
Con el dinero deberán construir pozos de captación de agua pluvial, para asegurar la dotación de recurso a la capital del país y el Valle de México.
Además, la obra tuvo que ser trazada de nuevo y le incluyeron 10 puentes, cuatro de ellos ecológicos, uno vehicular y otros de paso peatonal además para ganado.
El anuncio sobre el reinicio de la construcción lo hicieron este miércoles integrantes de los Bienes Comunales de San Francisco Xochicuautla en el municipio de Lerma, quienes impidieron el avance de la vía por 14 años y que en su totalidad tiene una longitud de 39.3 kilómetros compuesta por dos segmentos, 34.8 kilómetros de carretera son de cuota.
Esta construcción inició en 2007, durante el periodo de Enrique Peña como gobernador mexiquense, en ese momento la comunidad se amparó en contra por los daños que generaría a la comunidad, entre ellos la devastación del bosque donde se encuentran los acuíferos que dotan a 12 delegaciones de la Ciudad de México y 12 municipios mexiquenses.
La concesión fue otorgada a Autopistas de Vanguardia (Autovan), propiedad de Juan Armando Hinojosa Cantú, y según datos oficiales, la construcción de la autopista destruiría 600 mil metros cuadrados del Bosque Otomí-Mexica, también conocido como Gran Bosque de Agua.