Toluca/Estado de México
La Universidad Autónoma del Estado de México no tolerará, en ninguna circunstancia, actos, gestos, posturas o acciones que atenten contra la dignidad e integridad de las mujeres, aseveró el rector Alfredo Barrera Baca, al encabezar la ceremonia conmemorativa al Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
En el Patio del Centenario del Edificio de Rectoría, sostuvo que habrá cero tolerancia a comportamientos que atenten contra la integridad de las universitarias; por ello, la institución respalda y encauza las denuncias de las mujeres.
"Ante la violencia contra las mujeres no tenemos opción ni alternativa. No podemos optar entre eludir el problema o confrontarlo a medias, con las simulaciones irrespetuosas de un sistema que no ha sabido responder".
Puntualizó que en 2018 quedó establecido el Procedimiento de Responsabilidad Universitaria, instrumento que permitió dar formalidad a 79 denuncias en materia de violencia de género.
Además, refirió Barrera Baca, se han ejecutado 60 procedimientos de responsabilidad universitaria, de los cuales, se resolvieron 33, con 30 sanciones que corresponden a 10 destituciones, nueve suspensiones temporales, una expulsión y 10 amonestaciones por escrito.
Estos datos, afirmó, muestran que es necesario hacer valer las leyes y principios que rigen a la institución, así como integrar en los marcos legales la perspectiva de las víctimas.
Enfatizó que existe acoso y violencia contra las mujeres porque hay permisión, encubrimiento, justificaciones insolventes y porque es permitido. Necesitamos, subrayó, no eludir el problema y confrontarlo.
La comunidad universitaria, manifestó, se rige bajo un código ético y de racionalidad. Precisó que no se permitirá impunidad ni negligencia. “No caeremos en la parálisis de las instancias burocráticas, ni seguiremos la estela de simulación de estrategias fallidas”.
En la Universidad Autónoma del Estado de México, finalizó el rector Alfredo Barrera Baca, no puede permitirse la violencia de ningún tipo. Consentirlo, expresó, es solaparlo. Es fundamental integrar la voz de las víctimas y las necesidades reales de la comunidad. “La Universidad nos respalda y libraremos esta batalla con dignidad y razón”.