Toluca/Estado de México
La informalidad y los delitos como robo a negocios, a transeúnte, en transporte público y transporte de carga frena el regreso a las actividades en el Estado de México, pues no existen políticas públicas eficaces para combatir la comisión de delitos que se disparó en junio, cuando algunos sectores reactivaron, advirtió la presidenta del Consejo Coordinador Empresarial, Laura González.
“Estamos en un momento crítico, que incluso preocupa la reactivación económica, porque desde el minuto uno del regreso a las actividades se reportaron robos a mano armada, asaltos a trabajadores, a negocios, extorsiones. La pandemia no frenó la inseguridad, vimos un valle lógico en marzo, pero ahora vemos las gráficas, en junio se observa la incidencia y no lo podemos permitir”, destacó.
Añadió que los empresarios están “cansados” de tener que invertir cada vez más recursos en sistemas de seguridad y vigilancia, pues esos recursos deberían estar destinados a salarios o la capacitación de su personal y no “asumir el costo de las consecuencias de la delincuencia”.
“Es vergonzoso que una empresa deba asumir dentro de sus pérdidas lo inherente a la falta de una verdadera política pública de combate a los delitos que están detectados, que incluso están dentro de las estadísticas de las autoridades, quienes saben qué y dónde ocurren, además de cómo afecta al sector productivo”, reclamó.
En conferencia de prensa, explicó que con base en las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, entre enero y junio se cometieron 25 mil 990 delitos, de los cuales 218 fueron 3 mil 146 robos en transporte colectivo, 7 mil 600 robos a negocio, 6 mil 200 robos a transeúnte, homicidios dolosos, 102 secuestros, mil 385 extorsiones, siendo el mes de junio en el que repuntaron las cifras.
Si bien reconoció que no hay policías que alcancen a vigilar cada cuadra de los diversos municipios, ni piden que establezcan una patrulla por negocio o industria, lo que exigen es una verdadera estrategia de prevención, pues “hoy no estamos haciendo muchas cosas, algo está pasando dentro de nuestro tejido social que cada empresa es una fuente de ingresos para el delincuente”.
Cuestionó por qué los trabajadores de todos los sectores deben salir con el temor de que les sea “arrebatado” su ingreso, pues “las empresas y la gente no trabajan para la delincuencia, sino para las familias”.
Expresó que la entidad no se puede quedar rezagada y debe atender la pandemia pero también la crisis económica que podría generar más inseguridad, “todo va a la par, si no hay seguridad tampoco tranquilidad para invertir y generar empleos, eso desencadena problemas sociales, lo vemos venir, la crisis económica y laboral va a generar más problemas de seguridad pública porque la gente debe salir a buscar un sustento”.
