Toluca/Estado de México
Mientras el comercio establecido de Toluca permanece cerrado debido al regreso al Semáforo Rojo, en las inmediaciones de la terminal el COVID-19 pareciera no existir, pues el comercio ambulante acapara el paso peatonal e incluso entorpece la circulación de automóviles con sus productos, mientras que las personas no respetan las medidas sanitarias.
En un recorrido por la zona, se observó que ciudadanos acuden a realizar fuertes compras de productos no esenciales como juguetes y ropa, mismos que aseguran son parte de los regalos navideños que dejarán Santa y los Reyes Magos en sus hogares.
Asimismo, pese al llamado de quedarse en casa, seguir las medidas sanitarias y evitar aglomeraciones, en dicha zona, las personas circulan con el cubrebocas mal colocado o incluso sin él, consumen alimentos en la vía pública y acuden familias completas como si el virus que causó la pandemia desde hace casi un año a nivel mundial no existiera.
En esta zona, el comercio ambulante no solo se ubica sobre las banquetas, ahora también personas se encuentran en las inmediaciones del Mercado Juárez ofreciendo ropa, carteras y cubrebocas desde sus automóviles con las cajuelas abiertas, en donde exhiben sus productos.
Además, mientras que en el centro de la ciudad las autoridades cerraron Los Portales, plazas comerciales y parques, para evitar la concentración de personas, el comercio ambulante también está presente, principalmente sobre la calle Santos Degollado a un costado del Cosmovitral, donde igual que en la zona de la terminal, además de ropa, peluches y zapatos, se vende comida en la vía pública.
No obstante, la mayoría de los comercios establecidos se observan cerrados y hay constante vigilancia policiaca, aunque hay menos personas en las calles.
