Ecatepec/Estado de México
El pozo Pichardo Pagaza será el primero en contar con planta potabilizadora, seguido del Cruz Roja y posteriormente del John F. Kennedy, que en conjunto suministrarán 150 litros de agua por segundo, lo que beneficiará a unos 150 mil habitantes de colonias de la llamada Quinta Zona de Ecatepec.
Esta semana inició el traslado de los ocho tanques de acero al carbón requeridos para la planta potabilizadora del pozo Pichardo Pagaza, ubicado en la avenida del mismo nombre, entre las colonias Alborada de Aragón y Federación Ecatepec, que una vez en funcionamiento producirá 50 litros por segundo.
Próximamente los depósitos de acero también llegarán a los pozos Cruz Roja y John F. Kennedy, ubicados en el camellón de avenida Plutarco Elías Calles, a la altura de las colonias Polígonos 2 y Ciudad Amanecer, respectivamente, cada uno de los cuales también generarán 50 litros de agua por segundo.
Actualmente la Quinta Zona de Ecatepec enfrenta déficit de 500 litros de agua potable por segundo, por lo que con la entrada en operación de estos tres pozos el rezago se reducirá a 350 litros por segundo.
Mario Luna Escanamé, director del organismo Servicios de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Ecatepec (Sapase), informó que están en fabricación las plantas potabilizadoras que instalarán en los tres citados pozos, localizados en la Quinta Zona de Ecatepec.
Detalló que el próximo 10 de junio iniciará la instalación de la planta potabilizadora del pozo Pichardo Pagaza y prevén que esté funcionando el 17 de junio.
“Estamos hablando que en conjunto serán 50 litros por segundo, algo así como 4.3 millones de litros de agua diarios, es lo que vamos a estar tratando, para alimentar principalmente a dos colonias, que son las que están aledañas al pozo, son las colonias Federación Ecatepec y Alborada de Aragón., aunque pegado a esas colonias están Fuentes de Ecatepec, Poesía Mexicana, Petroquímica, Croc, que se verán beneficiadas de manera inmediata”, dijo.
Agregó: “La idea es que la segunda planta potabilizadora, que es para el pozo Cruz Roja Mexicana, que está en avenida Plutarco Elías, frente a las colonias Central Michoacana y Polígonos 2, esté en operación un mes después que el Pichardo”.
Luna Escanamé detalló que cada planta tendrá seis tanques de filtrado y dos de retrolavado, con capacidad para potabilizar 50 litros de agua por segundo. Los depósitos tienen sistemas de filtrado de arenas verdes y gravas, así como carbón activado, que limpian el agua y retiran fierro y manganeso, entre otras sustancias, para convertirla en potable.
Mencionó que la vida útil de la planta potabilizadora es de unos 30 años, aunque los filtros necesitan limpieza una vez al mes, para garantizar la calidad del agua.
“Estos son los equipos, es una realidad, aquí están los reactores que harán esa limpieza y que nos darán esa oportunidad de poder ir mitigando el problema de escasez de agua de la Quinta Zona lado oriente”, aseguró.
Añadió: “Pero estos tres pozos van a ir de la mano de dos pozos más, que deben estar arrancando su perforación quizá en una semana, dos semanas, que son los pozos Florida de Ciudad Azteca, el pozo Quetzalcóatl, y también estaríamos con el pozo CTM 14, en la colonia del mismo nombre, para hacer un total de cinco pozos durante esta administración (en la Quinta Zona). Estimamos poder incrementar el caudal de agua que se distribuye en esa zona hasta aproximadamente 50%”.
Los 24 tanques de acero al carbón que requieren las tres plantas potabilizadoras son fabricados en un taller localizado en la colonia Los Ángeles, en el municipio de Acolman, en los límites con Ecatepec.
Juan Carlos Valencia Plantillas, encargado de dicho taller, explicó que cada planta potabilizadora tendrá dos trenes, cada uno con tres tanques de filtrado y uno de retrolavado, ya que cada mes deberán limpiar los tanques de filtrado, lo que implica que uno de los trenes salga de operación y el servicio continúe con el otro, para que la planta no deje de funcionar.
Mencionó que los tanques son de acero al carbón y su fabricación es compleja. Las tapas requieren ser abombadas y el acero sometido a un proceso para evitar la corrosión, que incluye pintura al interior y exterior del depósito.
Los primeros dos filtros están destinados a ser el filtro de lecho profundo, el cual reduce la concentración de sólidos disueltos en el agua; el segundo es de intercambio iónico a través del cual disminuye minerales del agua como el hierro y manganeso, pues son nocivos para el consumo humano; finalmente, el tercer filtro es de carbón activado, en donde se potabiliza el agua para uso humano. Además, hay un tanque adicional, que es el de mantenimiento y retrolavado.
Los depósitos están hechos de acero al carbón, tienen un espesor de media pulgada, cuentan con soporte de acero estructural y están diseñados para resistir altas presiones. También tienen recubrimiento interno para no contaminar el agua y uno externo para el uso a intemperie.