Toluca/Estado de México
La baja afluencia que impactó a los hoteles durante la pandemia no alcanzó a los moteles de paso, de acuerdo con personal de estos negocios en Toluca y Metepec, si bien en principio debieron bajar las cortinas, pues no hubo clientes; tras seis duros meses, regresaron las parejas amorosas, aunque no al mismo nivel de lo que lograron antes de la pandemia, apenas si alcanzaron el 60% de ocupación.
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En algunos casos en los que incluso dispusieron de cuartos para prestar a médicos y enfermeras, la ayuda sólo duró de marzo y hasta septiembre del 2020, después ya no fueron necesarios y volvió la clientela que regularmente los visitaba, señaló el señor Moisés Flores del Hotel Erandi.
En estos espacios las parejas llegan por dos o tres horas y pese a la pandemia, en muy poco variaron las medidas de higiene, pues ya era requisito el lavado de sábanas, fundas de almohada, cortinas, baños, tinas y jacuzzi con cloro.
Aunque sí se adecuaron a medir la temperatura de los usuarios, usar gel sanitizante, tapetes en el acceso de los cuartos y la entrada principal, además de sanitizar las recamaras o cuartos con químicos, para asegurar que están libres de virus.
Alejandro Díaz, presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles afirmó que en todos los negocios del sector, cumplen con las medidas sanitarias estipuladas por las autoridades estatales y federales, incluso aquellas que se han demostrado que son inservibles, como el uso de tapetes sanitizantes, además que la higiene es crucial desde hace varios años, pues persiguen los distintivos que los destacan como higiénicos o de calidad.
Para este 14 de febrero, en los negocios se prepararon porque aumenta la afluencia, según Alejandra, mucama en un Hotel del centro de Toluca, desde el jueves Pasado y hasta el fin de semana después del Día de los Enamorados, por lo que ofertan desde una hora gratis, descuentos en habitaciones con jacuzzi y las que tienen alberca.
En varios de estos sitios se mantuvieron los precios que van desde 400 pesos la habitación sencilla hasta 700 u 800 aquella con jacuzzi. Incluso los hay de costos más altos, por ejemplo los que rebasan los mil pesos, pero que tienen diversos servicios, wifi, tubo, potros del amor y a veces, dijo la trabajadora "hasta les dejamos unos condones de regalo".
Detallaron que los empleados deben portar cubrebocas, guantes y caretas todo el tiempo; deben tener filtros sanitarios a la entrada para verificar la temperatura, además todo lo que hay en las habitaciones debe ser sanitizado antes y después de que los huéspedes hagan uso de ellas. Indicaron que los precios dependen del tipo de cuarto, suite o villa, pero sobre el bulevar Aeropuerto los hay de 350 pesos, habitación sencilla.
“Aquí no solo vienen con trabajadoras sexuales, llegan con una amiga, amante o la esposa. Hay parejas gays, mujeres con personas trans y hasta hombres solos que salen vestidos de mujeres y tras unas horas de fiesta regresan para asumir su identidad habitual”, dijo Vero, una afanadora en el Motel Boutique del centro de la capital mexiquense.
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