Toluca/Estado de México
Este Domingo de Ramos han llegado cientos de familias a la Catedral de la Arquidiócesis de Toluca, en donde, tras varios años, permitieron a las tejedoras de palma instalar sus puestos para vender los ramos que serán bendecidos al interior del recinto católico.
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El Domingo de Ramos, también llamado a veces sexto domingo de Cuaresma, es una celebración religiosa en la que la mayoría de las confesiones del cristianismo conmemora la entrada de Jesucristo en Jerusalén, iniciando la Semana Santa.
Esta es una fiesta cristiana que cae el domingo antes de Pascua, es decir, el sexto domingo de Cuaresma.
Para las tejedoras, este día es uno de los principales en ventas de sus piezas, que van de los 10 hasta los 50 pesos o más dependiendo del tamaño, la forma, si se trata de Cristos o de vírgenes e incluso si son solo palmas
Pese a que el costo de la materia prima elevó, pues un centenar les cuesta mil pesos o más, ellas mantuvieron el costo de sus piezas para lograr más ventas.
Tomasa Atilano aprendió a tejer palma a los ocho años de edad, su mamá le enseñó a tejer. Ahora tiene cerca de 44 años siguiendo la tradición, aunque reconoció que desde hace casi cinco años el Ayuntamiento no les permitía vender cerca de la Catedral.
“Con esta actividad ya no ganamos lo mismo, quién sabe si se está cambiando de religión o qué está pasando, para la época que es deberían haber más puestos vendiendo y más gente comprando”, comentó.
En la familia de Tomasa, sus cinco hijas se dedican a tejer, porque con la palma seca o fresca venden las figuras que van de 10 centímetros hasta ocho metros, también tienen contratos por mayoreo, además realizan pedidos para las iglesias, pero no siempre tienen este tipo de compras, lo que les impide seguir adelante con su actividad.
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